¿Quien atacará primero?, es la incógnita que, en caso de producirse, podría abrir un escenario absolutamente incierto en el devenir de esta escalada bélica con múltiples frentes abiertos. Desde Irán, y ante los constantes rumores sobre que el siguiente paso de Israel podría conllevar ataques a infraestructuras críticas en suelo iraní, uno de sus comandantes, Ali Fadavi, ha asegurado que Irán está preparado "para golpear infraestructuras energéticas y gasísticas" en Israel si Tel Aviv ataca. Y en el propio Beirut el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, reafirmó ayer en su primera visita oficial al extranjero su apoyo "claro" a Hezbolá.
Con este panorama, y con el papel proragonista que todo el mundo espera de EEUU, el expresidente Donald Trump ha considerado que Israel debería "golpear" las instalaciones nucleares iraníes. Es por ello que criticó al presidente demócrata Joe Biden por decir que se opone a ello. "Cuando le hicieron esa pregunta, la respuesta debería haber sido golpear lo nuclear primero, y preocuparse del resto después" dijo Trump. En este contexto, el exmandatario ha cargado contra Biden y contra la vicepresidenta y candidata demócrata a las elecciones de noviembre, Kamala Harris, a quienes ha responsabilizado del ataque de Irán a Israel. "Llevo mucho tiempo hablando de la Tercera Guerra Mundial (...). No vamos a hacer predicciones, pero (Biden y Harris) están muy cerca de provocar una catástrofe global. Tenemos un presidente y una vicepresidenta inexistentes que debería estar a cargo, pero nadie sabe qué está pasando". La propuesta de Trump contrasta por tanto con la planteada por Joe Biden, quien ha instado al Gobierno israelí liderado por el primer ministro Benjamin Netanyahu a buscar "otras alternativas" a los ataques contra instalaciones petrolíferas iraníes.
Ayuda de 143 millones de euros para los desplazados en Líbano
Mientras tanto, el Gobierno de Estados Unidos ha anunciado una ayuda humanitaria de cerca de 157 millones de dólares (unos 143 millones de euros) para apoyar a las poblaciones afectadas en Líbano, donde ya hay más de un millón de desplazados a causa de los bombardeos del Ejército de Israel. Lo anunciaba el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en su cuenta de la red social X.
The U.S. is at the forefront of humanitarian response to the growing crisis in Lebanon, announcing nearly $157 million in assistance today. We are committed to supporting those in need and delivering essential aid to displaced civilians, refugees and the communities hosting them.
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) October 4, 2024
"Esta nueva ayuda humanitaria llega en un momento de crisis humanitaria devastadora para Líbano (...). Instamos a otros donantes a que se unan a nosotros para contribuir a estas nuevas necesidades humanitarias", ha señalado el Departamento de Estado en el comunicado. Según el organismo, el año pasado el Gobierno estadounidense donó casi 386 millones de dólares (351,5 millones de euros) para apoyar a las poblaciones vulnerables de Líbano y Siria afectadas por el aumento del conflicto en Oriente Próximo.
Alerta en EEUU
El FBI ha alertado de la posibilidad de que se den en el país actos "contra la seguridad pública" con motivo del primer aniversario de los ataques del 7 de octubre de 2023 y ha pedido a la población que preste atención "a su entorno en todo momento y reporte actividades sospechosas a las autoridades".
"Es probable que organizaciones terroristas extranjeras y otros extremistas violentos sigan explotando las narrativas relacionadas con el conflicto para incitar a atacantes solitarios a llevar a cabo actos de violencia en Estados Unidos (...). El primer aniversario de los ataques del 7 de octubre podría motivar a actores amenazantes de todas las ideologías, incluidos los que propugnan el antisemitismo violento y la islamofobia, a participar en actos de violencia", ha advertido el FBI en un comunicado emitido junto al Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Tanto el FBI como el DHS consideran que esta efeméride puede ser un aliciente "para que los extremistas violentos y los perpetradores de delitos de odio participen en actos de violencia o amenacen la seguridad pública", sobre todo en vista del aumento de los delitos de odio "vinculados con el conflicto" observados en EEUU en el último año.