
Estados Unidos confirma como anunció el ministerio ruso de Defensa este sábado que Moscú ha utilizado misiles aerobalísticos hipersónicos "Kinzhal" en la invasión de Ucrania. Se trata de la primera vez que se utiliza este tipo de armamento en combate y según la administración de Joe Biden "es probable" que con este lanzamiento Vladimir Putin tuviera la intención de "probar las armas y enviar un mensaje a Occidente" sobre el músculo militar ruso contra el que sigue resistiendo Kiev.
Según el Kremlin este misil ha impactado en la localidad de Deliatin en la región ucraniana de Ivano-Frankivsk. Un ataque que ha sido confirmado por el portavoz del Comando de la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Yuri Ignat, que al margen de los daños y la destrucción no ha podido verificar si ha producido víctimas. Ignat lamenta que "Ucrania se ha convertido en un campo de pruebas para todo el arsenal de armas de misiles de Rusia".
La eficacia de estas armas radica en que este tipo de misiles viaja a una velocidad de "Mach 5", lo que supone cinco veces la velocidad del sonido. A esta velocidad se complica y mucho su detección, y suponen todo un reto para los sistemas de defensa antimisiles según ha explicado la CNN. Es por ello por lo que Estados Unidos se ha volcado en el desarrollo de este tipo de armamento en el que ya trabajan China y Rusia.
Continúan los ataques
Mientras tanto Moscú continúa el asedio a Ucrania. El Ministerio de Defensa ruso ha anunciado que este domingo ha asesinado a más de un centenar de militares de Kiev y "mercenarios extranjeros" en el ataque a un centro de entrenamiento en la región de Yitomir, al norte del país y a tan solo 10 kilómetros de Bielorrusia. Ataque que ha realizado también con misiles de alta precisión.
Por su parte las autoridades de Mariúpol han denunciado otro ataque ruso en este caso contra una escuela de arte en la que se refugiaban para salvar la vida más de 400 personas que han quedado sepultadas por los escombros. "Se sabe que el edificio ha sido destruido y los civiles todavía están bajo los escombros. Se está especificando información sobre el número de víctimas", reza el mensaje, publicado este domingo en la cuenta de Telegram del Ayuntamiento de este enclave arrasado por Putin.
115 niños asesinados ya
Un día más la Fiscalía de Ucrania ha puesto cifras a la barbarie rusa. Denuncia que al menos 115 niños han muerto, 3 más que el sábado, y 140 han resultado heridos por los ataques perpetrados por el Kremlin desde el inicio de la invasión.
Más de la mitad de estas víctimas se han producido en la capital, en Kiev. El resto en las localidades de Jákov, Chernihiv, Donetsk, Mikolaiv, Yitomir, Sumy y Jersón. De momento Naciones Unidas rebaja esta cifra a 34 fallecidos y 78 heridos.
Zelenski apela a las madres rusas
Pero las víctimas se producen en ambos bandos. Es por ello por lo que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha hecho un llamamiento a la opinión pública rusa evocando a las imágenes de los 14.000 rusos que habrían muerto desde que Rusia inició la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero. En un duro mensaje publicado en Telegram, Zelenski asegura que "en los puntos más conflictivos de los combates, nuestras líneas de defensa están prácticamente llenas de cadáveres de soldados rusos". "Cadáveres que", añade, "no están siendo recuperados por nadie".
Apela así a las madres de los soldados rusos vitales en otros conflictos como la guerra de Chechenia. El líder ucraniano ha sostenido que esas 14.000 muertes pertenecen a "14.000 madres, 14.000 padres, esposas, hijos, parientes y amigos", y pregunta a la población rusa si no han notado la pérdida de familiares militares en los últimos años.
