
Los socialistas franceses se plantean romper la alianza con La Francia Insumisa después de que la formación de ultraizquierda se negase a calificar a Hamás como organización terrorista. Mientras tanto, en España, el Gobierno de Pedro Sánchez arremete contra Israel por señalar a Ione Belarra, que ha acusado a Israel de "genocidio"; sigue protegiendo a la cúpula de Sumar, que se manifestó en contra de Israel el pasado domingo y ampara como "libertad de expresión" las declaraciones del secretario del PCE, Enrique Santiago, que también se ha negado a llamar terroristas a Hamás.
La postura de LFI sobre Hamás ha agravado las desavenencias dentro de la coalición de izquierdas formada en las pasadas legislativas de junio de 2022 y que parece tocada de muerte. Gran parte de la izquierda francesa (socialistas, comunistas y ecologistas) se niega a seguir asociándose con La Francia Insumisa (LFI), que dirige Jean-Luc Mélenchon después de que una de sus diputadas, Danielle Obono, considerase a Hamás "un movimiento de resistencia" y un "grupo político islamista que tiene una rama armada que resiste a Israel".
La líder de los ecologistas, Marine Tondelier, descalificó por "escandalosas" las palabras de Obono y agregó: "Basta ya. Lo que pasó el pasado día 7 (comienzo de los ataques de Hamás en Israel) nada tiene que ver con la resistencia. No ayudó a los gazatíes. Al contrario, cada imagen recibida estos días lo muestra".
La postura de LFI sobre Hamás tampoco ha gustado al Partido Socialista francés, cuyo líder, Olivier Faure, aseguró que se plantean poner en cuarentena la alianza parlamentaria que tienen con ellos en la Asamblea Nacional. "No podemos más con estas polémicas, estas divisiones que hacen que la izquierda no tenga discurso", aseguró Faure a la radio France Inter.
Por su parte, LFI asegura que sí han condenado "los crímenes de guerra abyectos cometidos contra civiles israelíes" y considera que la polémica responde a una maniobra para minar el liderazgo de Mélenchon, más débil que nunca y sumamente criticado por comunistas, socialistas y ecologistas.
Apología del terrorismo
Mientras el gobierno español considera que las declaraciones de sus socios de Gobierno son "libertad de expresión", el gobierno francés ha pedido a la Fiscalía que investigue las declaraciones de La Francia Insumisa por si constituyen un delito de apología del terrorismo.
El Gobierno también ha criticado duramente a LFI. La primera ministra, Élisabeth Borne, ha denunciado: "Rechazan calificar Hamás como terrorista (...) Para mí están fuera del espectro republicano".


