
El operador privado Ouigo ha respondido este lunes al señalamiento que sufrió por parte del Gobierno presidido por Pedro Sánchez después de que el pasado domingo 29 de junio una nueva avería provocara que miles de pasajeros se quedaran encerrados por horas en los vagones de los trenes a medio camino de su destino sin luz ni aire acondicionado y que otros miles vieran sus respectivos viajes retrasados. Algo por lo que el Ejecutivo señaló directamente a Ouigo, que ha dejado claro que la situación de constantes parones y retrasos en la red ferroviaria española es "inaceptable" y que la respuesta de Adif es "insuficiente".
En concreto, ha sido la directora general de Ouigo en España, Hélène Valenzuela, la que ha mostrado la disconformidad con el servicio prestado por la Administradora de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), propiedad del Ministerio de Transportes que actualmente dirige Óscar Puente. "No quiero restar importancia y quiero también tener empatía con la gente que se quedó bloqueada", ha explicado en el IV Foro de Movilidad de El Economista antes de explicar que "ha habido una serie de crisis" que han dejado una "situación inédita e inaceptable".
De esta forma, ha reclamado un "debate sereno" entre las operadoras y las empresas gubernamentales para mejorar la situación en el que Ouigo exponga su opinión sobre el estado de las vías españolas, sobre las que ha recriminado a Adif la falta de inversiones; así como una respuesta "insuficiente" ante las averías que se están produciendo: "No podemos esperar que pasen los problemas; hay que ir a un mantenimiento mucho más preventivo y no correctivo".
Falta de inversión en la prevención
En este sentido, ha recordado que la operadora que dirige ha propuesto hasta en ocho ocasiones desde 2022 invertir en un sistema de monitorización de la catenaria y los trenes que se está aplicando en Reino Unido y en Italia, y que se está comenzando a implementar en Francia. Una tecnología que ofrecería un control en la supervisión de la red pudiendo prevenir diferentes averías y dando herramientas para localizar y reparar de forma más eficaz las averías que se puedan ocasionar.
Asimismo, Valenzuela ha aseverado que la red ferroviaria hace marca España y que el desprestigio a la que ha sido sometida en los últimos meses ha supuesto un desgaste tanto de la imagen de la alta velocidad española como de la que ofrece el país al extranjero. "Tenemos que hacer algo", ha zanjado instando al Ejecutivo a proponer soluciones.
Estas declaraciones se producen después de que Adif apuntase directamente al parón de un tren de esta operadora privada como el causante de los retrasos del pasado domingo 29 de junio cuando en realidad el parón de este tren fue el origen del mismo pero sin ser responsabilidad de la operadora ya que fue la catenaria la que se saturó por la alta demanda de energía. De hecho, antes de publicarse este informe de Adif, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ya había apuntado a una supuesta culpa de Ouigo en el nuevo escándalo ferroviario.
Renfe critica la falta de inversión
Por su parte, también ha estado presente en el acto el director general adjunto a Presidencia, Estrategia y Relaciones Institucionales de Renfe, Sergio Bueno, que ha intentado quitar importancia al problema hace poco más de una semana explicando que este último parón sólo afectó a 21.000 pasajeros cuando Renfe mueve diariamente a 1,5 millones. Aun así, el propio Bueno ha reconocido que hay problemas en la red "con más frecuencia de la que les gustaría" y ha criticado la "lentitud" de las inversiones realizadas por el Ministerio de Puente.
Estas opiniones contrastan con las declaraciones del titular de Transportes, que ha defendido en numerosas ocasiones en sede parlamentaria que "el tren vive en España el mejor momento de su historia". De hecho, este mismo lunes ha aseverado en una entrevista ofrecida a TVE que los servicios ferroviarios son ahora mejores que cuando gobernaba el exjefe del Ejecutivo Mariano Rajoy.




