
Récord recaudatorio en la Seguridad Social a costa de las cotizaciones sociales que abonan los trabajadores, las empresas, y los autónomos del país. De enero a agosto, los ingresos por cotizaciones se dispararon un 6,8% respecto al mismo periodo de 2024 y alcanzaron los 117.248 millones de euros. Se trata de un incremento de 7.507 millones de euros.
Como ya publicamos en Libre Mercado, dentro de esta subida de cotizaciones, hay una partida que destaca sobre el resto. Se trata de los ingresos correspondientes al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), un instrumento en vigor desde el 1 de enero de 2023 y que se ha disparado un 32,5% este año, hasta llegar a los 3.237 millones de euros.
Todos los meses de enero desde 2023, el MEI encarece las nóminas cada vez más cada año a los más de 21 millones de trabajadores y empresas del país -sin excepción-. Eso sí, esta subida no genera a los afectados mayores derechos para cobrar la pensión el día que se jubilen.
La justificación del Gobierno de Pedro Sánchez para llevar a cabo este golpe fiscal es llenar la hucha de las pensiones para hacer frente a la oleada de jubilaciones masivas del baby boom en la que ya está inmerso el sistema de la Seguridad Social. El próximo mes de enero, la subida será del 0,90% en las cotizaciones y se repartirá entre trabajadores y empresas.
Sin embargo, para cumplir con Bruselas, la reforma de pensiones de 2023 llevada a cabo por José Luis Escrivá contemplaba que a partir de 2025, la AIReF evaluaría cada tres años todas las medidas aplicadas por el Gobierno para garantizar la sostenibilidad de las pensiones.
Si resultaban insuficientes (lo más probable), el Ejecutivo tendría que cumplir con una "cláusula de cierre" activada por la AIReF que obligaba a realizar los siguientes ajustes volver a subir todavía más las cotizaciones sociales, incrementar otro tipo de impuestos o hacer recortes. Sin embargo, el primer examen de la AIReF ha estado rodeado de polémica porque fue el Gobierno el que marcó las reglas de evaluación y el resultado ha sido: aprobado raspado.
Pero a quien no convence el Gobierno es a Fedea, que el pasado lunes publicó otro demoledor informe sobre el sistema de pensiones español.
Entre las principales conclusiones del think tank de Ángel de la Fuente está que el déficit de las pensiones será el doble de lo que presupuestó Escrivá. En concreto, los ingresos serán muy inferiores a los gastos, generando un déficit básico superior al 8% del PIB a partir de 2050.
Además, Fedea considera que el Gobierno debería haber activado ya la "cláusula de salvaguarda" porque las cuentas no cuadran. "La gran mayoría de los especialistas académicos y otros analistas privados y públicos (incluyendo el Banco de España y BBVA Research) han sido muy críticos con las proyecciones del Ministerio. Según un trabajo colectivo firmado por dieciséis especialistas (de la Fuente et al, 2023), las previsiones del MISSMI resultan poco plausibles porque se apoyan en supuestos demográficos y macroeconómicos más favorables que los utilizados por otras instituciones, así como en estimaciones no suficientemente documentadas y en ocasiones poco creíbles de los efectos presupuestarios de algunas de las medidas de la reciente reforma" señalan.
Como consecuencia, "concluye el informe, estas previsiones infravaloran los efectos de la reforma sobre el déficit presupuestario del sistema de pensiones y, por lo tanto, sobre el margen de gasto disponible para otras políticas. Los cálculos de este grupo de técnicos apuntan a un crecimiento sustancial del gasto en pensiones neto de nuevos ingresos, que rondaría los 1,5 puntos de PIB en promedio entre 2022 y 2050, y excedería los 3,5 puntos en 2050. Con estas proyecciones, la condición que activa la cláusula de salvaguarda del MEI se habría cumplido ya de partida, lo que exigiría, con la norma actual, una subida de las cotizaciones en ausencia de un consenso sobre medidas alternativas" consideran.
Así pues, "la reciente reforma debería haber suspendido su primer examen de viabilidad, confirmando las dudas existentes sobre su diseño. El aprobado raspado que la AIReF ha otorgado, más bien a rastras, al sistema en su reciente informe para la cláusula de cierre del MEI (AIReF, 2025a) no constituye una refutación creíble de estos cálculos previos. La propia Autoridad Fiscal afirma explícitamente en su informe que tal aprobado no garantiza, ni mucho menos, la sostenibilidad del sistema, que muestra síntomas claros de creciente estrés financiero tal como se muestra en un informe paralelo del propio organismo (AIReF, 2025b)" apunta el think tank.
"Aparentemente, la Comisión Europea tampoco ha otorgado excesiva credibilidad al ejercicio y ha presionado al Gobierno español para que lo repita el año que viene con reglas algo más equilibradas" añaden. Por tanto, otra nueva subida de cotizaciones podría golpear a empresas y trabajadores en el futuro.






