
Juan Lobato ha decidido inmolarse este lunes y no parece que haya nadie dispuesto a recoger su cadáver político. Tras la exclusiva publicada por ABC este domingo por la noche, y que ha supuesto un auténtico terremoto, al líder del PSOE madrileño le quedaba como única opción admitir los hechos, presentarse como la antítesis del sanchismo y aguardar hasta que se decrete el acta de defunción del mismo.
Pero después de avisar a Moncloa y cargos del PSOE de lo que estaba a punto de ver la luz, Lobato emitió un comunicado, que según su entorno contó con el visto bueno de Ferraz, en el que sostenía que lo que había acreditado ante notario es "que ni los socialistas madrileños ni Moncloa" habían recibido de la Fiscalía "ninguna información en absoluto relativa al novio de la Sra. Ayuso". "Al revés, queda acreditado que toda la información vino de medios de comunicación".
Y esto fue lo que sostuvo frente a viento y marea durante toda la mañana del lunes. Hasta que llegó la citación del Tribunal Supremo: a raíz de la noticia de ABC, el magistrado de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Ángel Hurtado, instructor de la causa abierta al fiscal general del Estado Álvaro García Ortiz y la fiscal jefe provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, ha dictado una providencia en la que acuerda la citación como testigo del secretario general del PSOE de Madrid para el próximo viernes 29 de noviembre a las 10 de la mañana. A partir de recibir esa citación, el socialista se negó a realizar más declaraciones a la prensa.
El PSOE-M bulle: "Es Bruce Willis en El Sexto Sentido"
Pero el partido está en punto de ebullición porque, además, hay que tener en cuenta que la declaración de Lobato en sede judicial coincide en el tiempo con el 41º Congreso Federal del PSOE, que empieza este viernes en Sevilla y que estaba pensado para que la proclamación de Pedro Sánchez fuera toda una fiesta. El socialismo madrileño bulle en estos momentos y distintos cargos han pasado por el diván de El País para mostrar su rabia y desahogarse. Varios son los que le piden a Lobato que ni vaya a la capital andaluza.
"¿A quién se le ocurre hacerle eso a una compañera de partido y que además pertenece a tu dirección? Es la gota que colma el vaso. Y, como yo, se van a mover otros en la misma dirección", asegura al diario de Prisa el secretario general de una de las principales agrupaciones de Madrid, que en 2021 apoyó a Lobato frente a la candidatura del alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, al que se impuso con un respaldo del 60%. "Es muy grave", añade el responsable de una agrupación que "de momento" se mantiene leal a Lobato. "Yo ya veía muy complicado que Juan siguiese, ¿pero esto? Mira que lo lamento pero ha sido muy torpe y sin ir más lejos este lunes se ha ido metiendo en una trampa encadenando entrevistas por la mañana. Más lio. Hasta que le han llamado del Supremo", apunta otro miembro de la ejecutiva de Madrid. Y así unos cuantos más.
"Es Bruce Willis en El Sexto Sentido", ironiza un diputado, en declaraciones a Europa Press, que cree que la caída de Lobato en esta ocasión se ha gestado en tres actos: levantar acta notarial de una conversación privada sin hablar con la otra persona, ir al encuentro con los periodistas de ABC el domingo y la rueda de entrevistas del lunes por la mañana en las que "se va apretando cada vez más el nudo de la soga". "Va a llegar muy mal a Sevilla... Si es que llega. De momento llegar llega tarde, que comparece el viernes por la mañana en Madrid", concluyen.
El PP le acusa de encubrir un delito
A su derecha, Lobato tampoco ha encontrado comprensión después de sus declaraciones de este lunes. Isabel Díaz Ayuso, desde Corea del Sur, donde se encuentra en viaje de trabajo, reaccionó en una grabación que se envió a la prensa dada la envergadura de los acontecimientos. "Como decía y como venía advirtiendo, han organizado, han orquestado un caso desde la mesa del presidente del Gobierno para intentar destruir a una rival política a través de su novio".
También se pronunció su número dos en el partido. "Hoy hemos conocido que, una vez más, el Gobierno del PSOE utiliza el aparato del Estado para atacar a un ciudadano particular sólo con el objetivo de dañar a un adversario político. El fiscal general del Estado en connivencia con la Moncloa utilizó comunicaciones privadas entre abogados y, por tanto, cometió un delito. Y hemos descubierto que Lobato lo sabía desde el 14 de marzo y al no haber dicho nada en ese momento, lo que hace es encubrir un delito", sentenció el secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, que se preguntó por qué ha tardado tanto el portavoz del PSOE en comunicar esta información o "por qué en vez de registrar esos wasap no se ha ido a un juzgado o a la Fiscalía a denunciar". "¿Qué conoce Lobato que exista en el móvil del fiscal general del Estado?", lanzó también Serrano para quien, visto lo visto, la cosa está ya clara: "Hoy sabemos que fue Pedro Sánchez quien ordenó el código contra Ayuso". Serrano subrayó que esto "no va de Ayuso y Sánchez, va de la democracia y los derechos de todos" e instó a Lobato a hacer pública ese acta notarial.
En todo ello incidió también el portavoz parlamentario de los populares en la Asamblea, que compareció ante los medios poco después del propio Lobato. "Pedro Sánchez ha demostrado hoy que es el capo de la mafia. Decir que está pervirtiendo la democracia es quedarse corto. Está claro que utilizó la Fiscalía General del Estado y la mesa de la Presidencia del Gobierno de la Nación para planificar un caso contra una rival política", sentenció Carlos Díaz Pache, quien tampoco absolvió a Lobato. "Participó o lo encubrió. Lo supo, le pasaron un documento que aún no estaba en los medios de comunicación. Hasta meses después no fue a una sede notarial para acreditar lo que decían sus mensajes" pero "lo que no sabemos es cuáles son las razones por las que meses después acredita esos mensajes. No sabemos qué dice ese acta notarial y es imprescindible que la haga pública".
Hasta el alcalde de la capital se pronunció ante el que sin duda fue el asunto político de máxima relevancia en la jornada. "Uno no va al notario a protocolizar unos wasap porque sí", sino porque, ante "la comisión de un eventual delito, quiere evitar su responsabilidad penal", explicó José Luis Martínez Almeida, abogado del Estado de profesión. El regidor apuntó hacia el meollo de la cuestión: "La clave no es lo que pudo conocer a través de la prensa, sino si Pilar Sánchez Acera, desde el Palacio de la Moncloa, le reveló el contenido de ese documento e, incluso, si le mandó una foto. Lobato podría encubrir un delito y tendría una consecuencia penal".
Qué ha ocurrido
ABC publicaba este domingo que Presidencia del Gobierno está tras la filtración de la información confidencial de Alberto González Amador, novio de la presidenta madrileña, que investiga el Tribunal Supremo y por la que está imputado el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. El email del abogado de González Amador salió de la Fiscalía el pasado 13 de marzo y habría ido a parar a Moncloa, donde diseñaron una estrategia para que fuera Juan Lobato, portavoz del PSOE en la Asamblea, el que lo mostrara en la sesión de control del 14 de marzo.
Esa estrategia se la hizo llegar a Lobato Pilar Sánchez Acera, en esos momentos jefa de Gabinete de Óscar López, quien a su vez ostentaba el cargo de director de Gabinete de la Presidencia del Gobierno. Hoy López es ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública y posible candidato de Ferraz para disputarle el puesto a Lobato al frente del partido en Madrid. Pilar Sánchez Acera está también en la Ejecutiva de Lobato y ostenta el cargo de secretaria de Política Institucional.
El líder de los socialistas madrileños puso resistencia a ser él quien mostrara el email por lo que Moncloa decidió filtrarlo a medios afines, como El Plural, la SER o eldiario.es, que en esos momentos ya habían reproducido parte de su contenido pero no el documento íntegro. La jefa de gabinete de Óscar López le había enviado a Lobato, junto a su mensaje, una fotografía de la confesión remitida por el abogado de González Amador al fiscal del caso. Así, una vez que fue publicado por dichos medios, Lobato se decidió a mostrarlo en la Asamblea.
Cuando el caso pasa al Tribunal Supremo y éste ordena el registro del despacho del fiscal general del Estado y de la fiscal jefe provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, también imputada, es cuando Lobato acude a una notaría en la que levanta acta de esos mensajes de wasap. Según aseguró él mismo este lunes, nadie del partido estaba informado de este movimiento.
"Yo acudo por decisión propia porque yo entiendo que eso es una información muy relevante que debemos tener acreditada. No lo consulto ni con dirección del partido, nuestra ni de Ferraz ni de nadie. Es un tema personal, de que lo que hay en mi teléfono quede acreditado ahí por si se perdía la información de mi móvil". "Si algo me jode es que se publique una conversación con una compañera porque el objetivo no era hacer público una conversación. Era tener acreditado un seguro que nos garantizara que si nos acusaban de que la Fiscalía nos dio información, que quedara claramente acreditado, como así está, que a nosotros no nos da la Fiscalía ni una información de nada en absoluto y que todo nos llega, tanto a Pilar como a mí, por vía de los medios de comunicación".
Ahora Lobato apunta hacia la notaría como autora de esa filtración y contra la que no descarta tomar medidas legales. Pero el periodista de ABC que firma la información, Javier Chicote, ha desmentido en el programa Todo es mentira, de Cuatro, que ésta la haya obtenido gracias a una filtración de la notaría. "Lo juro por mis hijos".