L D (Agencias)
En rueda de prensa, Bush anunció que ambos pedirán que se reanude el programa "Petróleo por alimentos" de Naciones Unidas, suspendido hace 10 días, del que depende la alimentación del 60 por ciento de la población iraquí. Establecido en 1995 para paliar los efectos del embargo económico impuesto tras la primera Guerra del Golfo, el programa estaba administrado de forma conjunta entre la ONU y el Gobierno de Sadam, pero ahora con la guerra es necesario reconfigurarlo. No quedó claro, sin embargo, hasta qué punto Bush y Blair están de acuerdo en cómo implicar a la ONU en la reconstrucción y la administración del Irak post-Sadam, algo que es muy importante para Tony Blair.
Blair anunció que se propondrán resoluciones al Consejo de Seguridad para asegurar la integridad de Irak, la administración de la postguerra y la ayuda humanitaria. "Es importante que Naciones Unidas esté implicada en el Irak post-Sadam Husein", aunque admitió que "quedan por ver muchas cuestiones que hay que discutir con los aliados". Los comentarios contrastan con los realizados este miércoles por el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, quien aseguró que la administración de Irak inmediatamente después de la guerra sería competencia exclusiva de estadounidenses y británicos, incluso mencionó que estaría a cargo del general Tommy Franks, que dirige la campaña militar.
El pueblo iraquí decidirá libremente
"El pueblo iraquí será libre y él será el que elija la forma de gobierno que quiera. No vendrá impuesta por gente del exterior", agregó Bush. Tras su reunión con Bush, Blair visita al secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien hace una semana pidió al Consejo de Seguridad que le fueran otorgados mayores poderes para que su oficina pueda administrar en solitario el programa durante la guerra. "La cuestión de la ayuda humanitaria no tiene que ser politizada y el Secretario General tiene que tener el poder para administrarla", dijo Bush, en clara referencia a la oposición mostrada en el Consejo de Seguridad, en particular por parte de Francia y Rusia, para reformar el programa humanitario. Rusos y franceses temen que esta ampliación de poderes también suponga modificar el programa para que estadounidenses y británicos descarguen el peso de la ayuda a Irak en la ONU y que la resolución sirva para legimitar la guerra.
La guerra durará lo que tenga que durar
Preguntados acerca de la duración de la guerra, que según afirmaba hoy el diario "The Washington Post" podría prolongarse durante meses, ambos mandatarios eludieron ofrecer cálculos específicos. "Durará todo el tiempo que se tarde en ganar. No hay calendario y los iraquíes tienen que saberlo, que Sadam será derrocado sin importar el tiempo que transcurra", afirmó Bush. "Llevamos apenas una semana en la guerra, aunque parezca mucho más por la cobertura continua de los medios de comunicación. Y en sólo una semana se ha logrado mucho, ya estamos a 75 kilómetros de Bagdad. Pero no depende del tiempo, sino de la naturaleza de la misión. La manera en la que operamos es para proteger el futuro de la población iraquí", comentó Blair. Bush reiteró que "las fuerzas de la coalición avanzan día a día de forma lenta pero certera". "Estamos haciendo frente a las unidades más desesperadas y duras del dictador", comentó.
Ejecuciones de soldados aliados
Acerca de la actuación de las tropas iraquíes, disfrazadas de civiles para atacar a los invasores, Bush dijo: "No me sorprende, Sadam ha torturado a su propia gente durante décadas. Sus hijos son gente brutal y de naturaleza bárbara. No me sorprende que actúen como actúan, ni que sus esbirros maten a la población civil y luego echen la culpa a los estadounidenes". Blair confirmó que los soldados muertos mostrados este jueves por la televisión fueron ejecutados. Bush no quiso responder acerca de si Estados Unidos utilizaría armas nucleares contra las tropas iraquíes en caso de verse atacado con armas químicas: "Lograremos la victoria", se limitó a decir. "Aquellos que utilicen armas de destrucción masiva serán juzgados como criminales de guerra", agregó.
Acerca de la oposición a la guerra por parte de varios países que han sido tradicionalmente aliados incondicionales de Estados Unidos, como Francia y Alemania, Bush dijo: "Estoy muy cómodo con la coalición de países que nos apoyan, que en número es mayor que la coalición que respaldó la Guerra del Golfo de 1991. Tenemos muchos aliados y estamos muy orgullosos de ellos".
Blair anunció que se propondrán resoluciones al Consejo de Seguridad para asegurar la integridad de Irak, la administración de la postguerra y la ayuda humanitaria. "Es importante que Naciones Unidas esté implicada en el Irak post-Sadam Husein", aunque admitió que "quedan por ver muchas cuestiones que hay que discutir con los aliados". Los comentarios contrastan con los realizados este miércoles por el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, quien aseguró que la administración de Irak inmediatamente después de la guerra sería competencia exclusiva de estadounidenses y británicos, incluso mencionó que estaría a cargo del general Tommy Franks, que dirige la campaña militar.
El pueblo iraquí decidirá libremente
"El pueblo iraquí será libre y él será el que elija la forma de gobierno que quiera. No vendrá impuesta por gente del exterior", agregó Bush. Tras su reunión con Bush, Blair visita al secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien hace una semana pidió al Consejo de Seguridad que le fueran otorgados mayores poderes para que su oficina pueda administrar en solitario el programa durante la guerra. "La cuestión de la ayuda humanitaria no tiene que ser politizada y el Secretario General tiene que tener el poder para administrarla", dijo Bush, en clara referencia a la oposición mostrada en el Consejo de Seguridad, en particular por parte de Francia y Rusia, para reformar el programa humanitario. Rusos y franceses temen que esta ampliación de poderes también suponga modificar el programa para que estadounidenses y británicos descarguen el peso de la ayuda a Irak en la ONU y que la resolución sirva para legimitar la guerra.
La guerra durará lo que tenga que durar
Preguntados acerca de la duración de la guerra, que según afirmaba hoy el diario "The Washington Post" podría prolongarse durante meses, ambos mandatarios eludieron ofrecer cálculos específicos. "Durará todo el tiempo que se tarde en ganar. No hay calendario y los iraquíes tienen que saberlo, que Sadam será derrocado sin importar el tiempo que transcurra", afirmó Bush. "Llevamos apenas una semana en la guerra, aunque parezca mucho más por la cobertura continua de los medios de comunicación. Y en sólo una semana se ha logrado mucho, ya estamos a 75 kilómetros de Bagdad. Pero no depende del tiempo, sino de la naturaleza de la misión. La manera en la que operamos es para proteger el futuro de la población iraquí", comentó Blair. Bush reiteró que "las fuerzas de la coalición avanzan día a día de forma lenta pero certera". "Estamos haciendo frente a las unidades más desesperadas y duras del dictador", comentó.
Ejecuciones de soldados aliados
Acerca de la actuación de las tropas iraquíes, disfrazadas de civiles para atacar a los invasores, Bush dijo: "No me sorprende, Sadam ha torturado a su propia gente durante décadas. Sus hijos son gente brutal y de naturaleza bárbara. No me sorprende que actúen como actúan, ni que sus esbirros maten a la población civil y luego echen la culpa a los estadounidenes". Blair confirmó que los soldados muertos mostrados este jueves por la televisión fueron ejecutados. Bush no quiso responder acerca de si Estados Unidos utilizaría armas nucleares contra las tropas iraquíes en caso de verse atacado con armas químicas: "Lograremos la victoria", se limitó a decir. "Aquellos que utilicen armas de destrucción masiva serán juzgados como criminales de guerra", agregó.
Acerca de la oposición a la guerra por parte de varios países que han sido tradicionalmente aliados incondicionales de Estados Unidos, como Francia y Alemania, Bush dijo: "Estoy muy cómodo con la coalición de países que nos apoyan, que en número es mayor que la coalición que respaldó la Guerra del Golfo de 1991. Tenemos muchos aliados y estamos muy orgullosos de ellos".