L 7D (Agencias)
"Los poderes del Estado deben actuar a tiempo para evitar males mayores (...) no puede haber gente que siga llamando a que haya un golpe de Estado", declaró Chávez en su dominical programa de radio y televisión "Aló, Presidente". Chávez fue derrocado durante 48 horas por un golpe de Estado el 11 de abril del 2002, que instaló un Gobierno transitorio presidido por el líder empresarial Pedro Carmona, prófugo de la justicia y exiliado en Colombia desde mayo de 2002.
El gobernante reiteró que la acción de los diputados opositores de evitar "violentamente" el miércoles pasado la instalación de una polémica sesión legislativa especial fue un "golpe de Estado a la Asamblea Nacional" (AN). Chávez sugirió a los ciudadanos y a sus legisladores aliados, que dominan un 51 por ciento de la AN, de 165 miembros, pedir el procesamiento judicial de los "diputados golpistas" que intentaron "sabotear e impedir el funcionamiento de un Poder del Estado".
El miércoles pasado, los grupos de oposición ocuparon los puestos de la directiva parlamentaria, y también tiraron e incluso quemaron papeles en el hemiciclo para impedir la sesión. La reunión especial legislativa fue suspendida y convocada por el presidente de la AN, el oficialista Francisco Ameliach, para el viernes pasado, en la calle, donde se celebró sin incidentes. En la sesión especial, la oposición no asistió por considerarla "ilegal y nula", la mayoría oficialista aprobó una reforma parcial del Reglamento Interior y de Debates de la AN. Esa reforma acelerará la aprobación de "43 leyes que el país necesita" y que están desde hace "más de tres meses represadas" en una comisión legislativa dominada por la oposición, según el diputado oficialista William Lara.
El gobernante reiteró que la acción de los diputados opositores de evitar "violentamente" el miércoles pasado la instalación de una polémica sesión legislativa especial fue un "golpe de Estado a la Asamblea Nacional" (AN). Chávez sugirió a los ciudadanos y a sus legisladores aliados, que dominan un 51 por ciento de la AN, de 165 miembros, pedir el procesamiento judicial de los "diputados golpistas" que intentaron "sabotear e impedir el funcionamiento de un Poder del Estado".
El miércoles pasado, los grupos de oposición ocuparon los puestos de la directiva parlamentaria, y también tiraron e incluso quemaron papeles en el hemiciclo para impedir la sesión. La reunión especial legislativa fue suspendida y convocada por el presidente de la AN, el oficialista Francisco Ameliach, para el viernes pasado, en la calle, donde se celebró sin incidentes. En la sesión especial, la oposición no asistió por considerarla "ilegal y nula", la mayoría oficialista aprobó una reforma parcial del Reglamento Interior y de Debates de la AN. Esa reforma acelerará la aprobación de "43 leyes que el país necesita" y que están desde hace "más de tres meses represadas" en una comisión legislativa dominada por la oposición, según el diputado oficialista William Lara.