LD (EFE) En un comunicado de prensa, la ONU en Afganistán ha confirmado que al menos cuatro trabajadores nepalíes y un afgano, que viajaban en un vehículo de la Naciones Unidas, han muerto al explotar una bomba colocada junto a la carretera en la ciudad sureña de Kandahar.
El jefe de la Policía de Kandahar, Esmatullah Alizai, dijo que el suceso tuvo lugar cuando un convoy de vehículos de la organización internacional circulaba por la zona, que ya ha sido acordonada por las fuerzas de seguridad. Aseguró que el artefacto había sido instalado poco antes de la explosión por "enemigos de Afganistán", un término utilizado por los funcionarios afganos para referirse a los terroristas talibanes.
Adrian Edwards, portavoz de la ONU, señala en el texto oficial que "los ataques contra civiles son una clara violación de la ley humanitaria internacional y la ONU buscará el castigo para quienes están detrás de la acción". Naciones Unidas expresó también su condolencia por la muerte de cuatro niños en una explosión en Herat (oeste), donde está desplegado parte del contingente de las tropas españolas en Afganistán.
