LD (EFE) En declaraciones a una radiodifusora de Manila, Ignacio Bunye, declaró que el presidente del Senado, Franklin Drilon, está conspirando para debilitar el poder de la presidenta del país, Gloria Macapagal Arroyo, y posibilitar su caída. Los supuestos intentos de Drilon se remontan al momento en que la oposición acusó a la presidenta de organizar un fraude electoral para ganar las elecciones de 2004.
Las acusaciones de Bunye se basaban en unas cintas en las que se grabó una conversación en la que la presidenta presuntamente instruía a un alto funcionario electoral sobre la forma de llevar a cabo el fraude. Explicó que Drilon, entonces un aliado del Gobierno, convenció a Macapagal Arroyo para que se dirigiera el pasado junio a la nación admitiendo que había realizado la llamada al mencionado funcionario, aunque en su intervención televisada negó que fuera para apañar los comicios.
Después de que la mandataria admitiera su error, Drilon se sumó a las voces exigiendo la dimisión de la presidenta y contribuyó a agrandar una crisis política que aún no ha finalizado, a pesar de que en septiembre el Congreso rechazó la petición de la oposición para iniciar el proceso de incapacitación de Macapagal Arroyo.
Según los analistas, desde entonces el Gobierno pretende sustituir a Drilon como presidente del Senado, donde actualmente se estudian las polémicas cintas y donde se mantiene el pulso entre la oposición y el Gobierno.