LD (Agencias)
El IRA ha divulgados dos comunicados de prensa: el entregado el 13 de abril a los gobiernos de Londres y Dublín, por el que fue acusado de "falta de claridad", y otro en el que afirma que ambos ejecutivos cometieron un abuso de confianza. En el primero señala que la organización “no plantea ninguna amenaza para los unionistas ni para el proceso de paz” en Irlanda del Norte y que por ello está dispuesto a llevar a cabo un tercer acto de desarme poco antes de que el proceso se sumiera en una crisis. "No existe una falta de claridad; nuestra declaración y los compromisos que incluía dependían de un acuerdo que involucraba a ambos gobiernos, al Partido Unionista del Ulster y al Sinn Fein", apuntó.
El comunicado entregado hace tres semanas a los primeros ministros del Reino Unido, Tony Blair, e Irlanda, Bertie Ahern, indicaba que "el liderazgo del IRA reitera nuestro compromiso para resolver el asunto de las armas". Dice que "los compromisos de los dos gobiernos, incluida el final de la suspensión de las instituciones políticas y el firme compromiso del líder del Partido Unionista del Ulster de que apoyará de forma activa el trabajo sostenido de las instituciones políticas y de otros elementos del Acuerdo de Viernes Santo, permite hacerlo".
En ese comunicado, el IRA señalaba que estaba decidido a asegurar que sus "actividades, disciplinas y estrategias" eran coherentes con la búsqueda del fin del conflicto en el Ulster. Esa declaración fue considerada confusa por el Gobierno de Tony Blair, que la semana pasada decidió suspender hasta otoño las elecciones a la asamblea norirlandesa previstas para finales de este mes, pese al desacuerdo del primer ministro irlandés.
En su comunicado del 13 de abril, el grupo terrorista señaló que había mantenido nuevos contactos con la Comisión internacional de Desarme que preside el general canadiense John de Chastelain, a pesar de que se creía que ello no había ocurrido. "Habíamos hecho preparativos para que quedasen sin uso una serie de municiones y, ante la posibilidad de un acuerdo, íbamos a actuar de forma inmediata y nuestros preparativos estaban en un estado avanzado", agregó.
El comunicado entregado hace tres semanas a los primeros ministros del Reino Unido, Tony Blair, e Irlanda, Bertie Ahern, indicaba que "el liderazgo del IRA reitera nuestro compromiso para resolver el asunto de las armas". Dice que "los compromisos de los dos gobiernos, incluida el final de la suspensión de las instituciones políticas y el firme compromiso del líder del Partido Unionista del Ulster de que apoyará de forma activa el trabajo sostenido de las instituciones políticas y de otros elementos del Acuerdo de Viernes Santo, permite hacerlo".
En ese comunicado, el IRA señalaba que estaba decidido a asegurar que sus "actividades, disciplinas y estrategias" eran coherentes con la búsqueda del fin del conflicto en el Ulster. Esa declaración fue considerada confusa por el Gobierno de Tony Blair, que la semana pasada decidió suspender hasta otoño las elecciones a la asamblea norirlandesa previstas para finales de este mes, pese al desacuerdo del primer ministro irlandés.
En su comunicado del 13 de abril, el grupo terrorista señaló que había mantenido nuevos contactos con la Comisión internacional de Desarme que preside el general canadiense John de Chastelain, a pesar de que se creía que ello no había ocurrido. "Habíamos hecho preparativos para que quedasen sin uso una serie de municiones y, ante la posibilidad de un acuerdo, íbamos a actuar de forma inmediata y nuestros preparativos estaban en un estado avanzado", agregó.
