LD (Agencias) En un comunicado de prensa, la Guardia Civil española asegura que los servicios de seguridad franceses no le comunicaron hasta el día once de agosto la identidad del disidente marroquí Hicham Mandari, asesinado el pasado cuatro de agosto en Estepona.
El texto afirma que "a día de hoy (16 de agosto), la unidad orgánica de Policía Judicial que investiga los hechos no ha recibido de las autoridades francesas comunicación oficial sobre la identificación del cadáver". La Guardia Civil explica que sobre las doce de la noche del cinco de agosto "se tuvo conocimiento en el puesto principal de Mijas (Málaga), de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, del hallazgo del cadáver de un individuo en un párking sito en la c/ Viñuela de la mencionada localidad, el cual presentaba un impacto de bala en la cabeza".
El comunicado añade que entre las pertenencias del fallecido se encontró "un permiso de conducir italiano a nombre de Ben Al Asan Ala Laoui Icam". A fin de conocer su identidad, añade el instituto armado, "se consultaron los antecedentes en los archivos informáticos de la Guardia Civil y de la Policía, obteniendo resultado negativo, al igual que en las pruebas dactiloscópicas llevadas a cabo". Al día siguiente, el 6 de agosto, la Guardia Civil pidió a la oficina de Sirene Italia, por el documento que portaba el cadáver, y a la de Sirene Francia, por dos tarjetas relacionadas con ese país incluidas entre sus pertenencias, la consulta de sus bases.
Según una de las líneas de la investigación para esclarecer el crimen, a la que ha tenido acceso el periódico español El Mundo, los agentes consideran que Mandari fue traicionado por tres guardaespaldas facilitando el trabajo del asesino. Según los datos, el autor del único disparo que acabó en un aparcamiento con el disidente estuvo acompañado por otras dos personas que, posiblemente, habrían realizado labores de vigilancia.