L D (EFE) El jefe de las Fuerzas Armadas de Filipinas, el general Hermogenes Esperon, afirmó en rueda de prensa en Manila que la identificación realizada por el FBI (Oficina Federal de Investigación) es concluyente. "El cadáver desenterrado el 27 de diciembre pasado es el de Jadafi Janjalani, el conocido líder de Abu Sayyaf", manifestó Esperon."Las Fuerzas Armadas de Filipinas se sienten honradas de poder anunciar que hemos neutralizado el centro de gravedad del terrorismo en Filipinas", destacó el general. Estados Unidos ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares por su captura.
La localización de cadáver del hombre de 31 años que traía de cabeza a los cuerpos de seguridad en Filipinas se consiguió gracias a las confesiones de dos miembros de Abu Sayyaf capturados. Ellos fueron los que delataron dónde sepultaron a su jefe, y el 27 de diciembre último un grupo de marines desenterró en Patikul, en la isla de Joló, a unos 980 kilómetros al sur de Manila, unos restos humanos irreconocibles. Ahora se sabe que Jadafi perdió la vida en el combate librado el 4 de septiembre de 2006 cuando un grupo de 28 soldados se infiltró en el campamento rebelde y, viendo cortada su retirada, atacó.
El soldado de primera Nichols Polmo declararía unos días después, mientras le curaban en el Hospital General Campo Navarro, que Jadafi "Janjalani se movía de un lado para otro ordenando a sus hombres que atacaran". Ninguno de los supervivientes pudo asegurar si habían matado o herido al jefe de Abu Sayyaf, aún menos a los terroristas indonesios Dulmatin y Umar Patek, a quienes se les suponía en su compañía. Estados Unidos ofrece diez millones de dólares por la captura de Dulmatin y un millón por Patek.
Esperon agradeció en particular la cooperación técnica y logística prestada por Estados Unidos en la lucha antiterroristas en el país. El periódico The Phlippine Star, el segundo de Filipinas por el número de tirada, informó en su edición de hoy de que agentes antiterroristas de Estados Unidos y Australia operan en la actualidad bajo todo tipo de coberturas en el sur de Filipinas, considerado un terreno fértil para el terrorismo islámico.
"Los agentes extranjeros se hacen pasar por turistas, comerciantes, asesores y hasta cazadores de tesoros", destaca el articulista, que se basa en una fuente anónima. "La percepción de que algunas partes de Mindanao (principal isla del sur de Filipinas) se han convertido en criaderos de terroristas ha llevado a la isla a estos agentes", explica la fuente anónima. Según la información, la CIA (Servicio Central de Información) y el FBI tienen personal destacado en Mindanao en estos momentos. "Vamos a limpiar Joló de terroristas. No vamos a permitirles que se escondan en parte alguna de Filipinas", aseguró Esperon.
Macapagal renueva su promesa de acabar de una vez por el terrorismo
La localización de cadáver del hombre de 31 años que traía de cabeza a los cuerpos de seguridad en Filipinas se consiguió gracias a las confesiones de dos miembros de Abu Sayyaf capturados. Ellos fueron los que delataron dónde sepultaron a su jefe, y el 27 de diciembre último un grupo de marines desenterró en Patikul, en la isla de Joló, a unos 980 kilómetros al sur de Manila, unos restos humanos irreconocibles. Ahora se sabe que Jadafi perdió la vida en el combate librado el 4 de septiembre de 2006 cuando un grupo de 28 soldados se infiltró en el campamento rebelde y, viendo cortada su retirada, atacó.
El soldado de primera Nichols Polmo declararía unos días después, mientras le curaban en el Hospital General Campo Navarro, que Jadafi "Janjalani se movía de un lado para otro ordenando a sus hombres que atacaran". Ninguno de los supervivientes pudo asegurar si habían matado o herido al jefe de Abu Sayyaf, aún menos a los terroristas indonesios Dulmatin y Umar Patek, a quienes se les suponía en su compañía. Estados Unidos ofrece diez millones de dólares por la captura de Dulmatin y un millón por Patek.
Esperon agradeció en particular la cooperación técnica y logística prestada por Estados Unidos en la lucha antiterroristas en el país. El periódico The Phlippine Star, el segundo de Filipinas por el número de tirada, informó en su edición de hoy de que agentes antiterroristas de Estados Unidos y Australia operan en la actualidad bajo todo tipo de coberturas en el sur de Filipinas, considerado un terreno fértil para el terrorismo islámico.
"Los agentes extranjeros se hacen pasar por turistas, comerciantes, asesores y hasta cazadores de tesoros", destaca el articulista, que se basa en una fuente anónima. "La percepción de que algunas partes de Mindanao (principal isla del sur de Filipinas) se han convertido en criaderos de terroristas ha llevado a la isla a estos agentes", explica la fuente anónima. Según la información, la CIA (Servicio Central de Información) y el FBI tienen personal destacado en Mindanao en estos momentos. "Vamos a limpiar Joló de terroristas. No vamos a permitirles que se escondan en parte alguna de Filipinas", aseguró Esperon.
Macapagal renueva su promesa de acabar de una vez por el terrorismo
La presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, renovó el jueves pasado su promesa de acabar de una vez por todas con el terrorismo, después de que se confirmara la muerte de Jainal Antel Sali, más conocido por su alias Abu Solaiman, uno de los miembros de la cúpula de Abu Sayyaf. La desaparición de Abu Solaiman dejaba a la dirección de la banda sólo con Jadafi e Isnilon Hapilon. Falta por ver si Hapilon asumirá ahora que se ha quedado solo el liderazgo de esta organización fundada en 1991 por un puñado de ex combatientes de la guerra de Afganistán contra la desaparecida Unión Soviética y que, sin un claro programa político, se ha caracterizado por la agresividad y los secuestros sonados.
Estados Unidos se incorporó a la lucha contra el terrorismo en Filipinas en 2006 y desde entonces participa en maniobras militares conjuntas de carácter anual y en otros tipos de programas. Esta semana se confirmó la muerte de Jainal Antel Sali, más conocido por su alias Abu Solaiman, otro de los miembros de la cúpula de Abu Sayyaf.
Por otra parte, un soldado y un terrorista comunista murieron este sábado en un enfrentamiento entre las tropas gubernamentales y el Nuevo Ejército del Pueblo (NEP), el gru`po terrorista del ilegal Partido Comunista de Filipinas, en la isla de Luzón. El combate entre el NEP y el Ejército ocurrió en la mañana de este sábado en la localidad de San Isidro, a unos 220 kilómetros al sureste de Manila.
El director de la Oficina de la Policía de la Región 3, Ismael Rafanes, indicó que se trata de un comando escindido del NEP que se dedica al bandidaje y a otras actividades criminales. El Partido Comunista de Filipinas fundó el NEP en 1969 y se calcula que el grupo terrorista cuenta en la actualidad con unos 7.200 combatientes. El conflicto con el terrorismo comunista en Filipinas se cobra vidas casi a diario y tan sólo en el año 2005 hubo 1.255 enfrentamientos armados, según datos oficiales.
El director de la Oficina de la Policía de la Región 3, Ismael Rafanes, indicó que se trata de un comando escindido del NEP que se dedica al bandidaje y a otras actividades criminales. El Partido Comunista de Filipinas fundó el NEP en 1969 y se calcula que el grupo terrorista cuenta en la actualidad con unos 7.200 combatientes. El conflicto con el terrorismo comunista en Filipinas se cobra vidas casi a diario y tan sólo en el año 2005 hubo 1.255 enfrentamientos armados, según datos oficiales.