LD (EFE) El director de la Policía de Manila, Vidal, Querol, ha informado de que los agentes a su cargo aplicarán una política de "tolerancia máxima" con los manifestantes convocados para exigir la dimisión de la presidenta Gloria Macapagal Arroyo, acusada de haber ganado las elecciones presidenciales de manera fraudulenta.
La organización convocante, "Bayan Muna" (Pueblo Primero), grupo opositor de izquierdas con representación parlamentaria, y otros grupos de la sociedad civil se han unido en una manifestación en la plaza de Miranda, en el centro de la ciudad, en protesta por lo que ya se conoce como "Gloriagate", el escándalo político surgido a raíz de las cintas presuntamente grabadas a la presidenta.
En las polémicas grabaciones, la presidenta Macapagal habla con un funcionario electoral, Garciliano, para amañar a su favor las elecciones de mayo de 2004 que ganó frente al candidato opositor Fernando Poe.
El pasado lunes, Macapagal Arroyo en retransmisión directa por televisión a toda Filipinas, reconocía implícitamente que era ella quien hablaba con el funcionario electoral, pero negó que tratara de influir en los resultados de los comicios de 2004, en lo que admitió fue "una falta de juicio" por su parte.
