El intérprete afgano Sultan Munadi, que fue secuestrado junto a Farrell en un pueblo al sur de Kunduz, murió durante la operación de rescate en la madrugada del martes.
El Ministerio de Defensa ha confirmado que ha resultado un muerto un soldado británico, de quien no se facilitaron detalles, falleció en una refriega con insurgentes talibanes durante la misión de rescate.
Ante las informaciones que hablan de la implicación de fuerzas especiales en la liberación, una portavoz de Defensa se limitó a decir: "No hacemos comentarios sobre las fuerzas especiales. Todo lo que podemos decir es que fue una operación de la OTAN".
"Soy libre", dijo Farrell en una breve llamada telefónica al diario poco después de ser liberado, en la que explicó que había sido "extraído" por un comando compuesto por "un montón de soldados" que mantuvo un feroz tiroteo con sus captores.
El NYT cita a un periodista afgano que habló con los habitantes del pueblo y asegura que varios civiles, incluidos mujeres y niños, murieron durante el tiroteo que se produjo para liberar a los informadores secuestrados. El diario añade que nadie en el periódico ni en la familia de Farrell sabía que iba a tener lugar una operación militar para liberarlo.
Farrell y Munadi fueron secuestrados el pasado sábado, cuando investigaban el bombardeo que un día antes lanzaron aviones de la OTAN contra dos camiones de gasolina secuestrados por los talibanes y que según algunas fuentes causó al menos 90 muertos, muchos de ellos civiles.
Farrell, británico de 46 años, ha cubierto las guerras de Irak y Afganistán, además de trabajar en Oriente Medio y el sur de Asia, mientras que Munadi trabajaba habitualmente para el NYT además de otras organizaciones
