LD (Agencias)
Una bomba estalló a media tarde de este jueves en un mercado público en la ciudad de Koronadal, en la isla de Mindanao. El artefacto hizo explosión al lado de una tienda de videojuegos. Los servicios sanitarias han confirmado que la mayoría de las vicitimas son menores. Fuentes de la autoridad local han informado de que los muertos son una niña de once años, una mujer de 46 y un hombre aún no identificado. Sin embargo, fuentes sanitarias han ubicado en seis la cifra de personas asesinadas. Los heridos ascienden a 25, y la gobernadora de la provincia, Daisy Fuentes, confirmó que nueve de ellos "están en condiciones críticas".
La gobernadora Fuentes informó que el alcalde de Koronadal, Fernando de Miguel, había recibido en las últimas semanas llamadas telefónicas de un hombre que se identificó como Abu Sulaimán y que exigía un millón de pesos (16.569 euros) para evitar que pasara "algo malo en la ciudad. Fuentes añadió que el desconocido "no reveló a qué banda pertenece", pero señaló que la "extorsión" es el habitual "modus operandi" de los grupos terroristas musulmanes. Precisamente otro hombre que se identificaba como Abu Sulaimán llamó a de Miguel después del último atentado exigiendo cuatro millones de pesos (66.270 euros) o habría más atentados.
En declaraciones a la prensa, la presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, ha responsabilziado de la masacre al grupo terrorista del Abu Sayyaf, vinculado por EEUU a la red Al-Qaeda. La mandataria condenó firmemente el atentado y prometió perseguir a los responsables para "llevarlos ante la justicia. Otra organización sospechosa es el Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), la cual busca crear un estado musulman en el sur del país.
La gobernadora Fuentes informó que el alcalde de Koronadal, Fernando de Miguel, había recibido en las últimas semanas llamadas telefónicas de un hombre que se identificó como Abu Sulaimán y que exigía un millón de pesos (16.569 euros) para evitar que pasara "algo malo en la ciudad. Fuentes añadió que el desconocido "no reveló a qué banda pertenece", pero señaló que la "extorsión" es el habitual "modus operandi" de los grupos terroristas musulmanes. Precisamente otro hombre que se identificaba como Abu Sulaimán llamó a de Miguel después del último atentado exigiendo cuatro millones de pesos (66.270 euros) o habría más atentados.
En declaraciones a la prensa, la presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, ha responsabilziado de la masacre al grupo terrorista del Abu Sayyaf, vinculado por EEUU a la red Al-Qaeda. La mandataria condenó firmemente el atentado y prometió perseguir a los responsables para "llevarlos ante la justicia. Otra organización sospechosa es el Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), la cual busca crear un estado musulman en el sur del país.