La banda terrorista ETA asesinó en Leiza el 24 de septiembre de 2002 al agente de la Guardia Civil Juan Carlos Beiro en un atentado cometido con una pancarta bomba, que estalló cuando el agente se disponía a retirarla.
Ésta fue la última vez que ETA atentó mortalmente en esta localidad del norte de Navarra, actualmente gobernada por cargos elegidos en las listas de ANV, grupo disuelto tras su ilegalización por su vinculación a la banda terrorista
Por otro lado, la banda terrorista ETA atentó en Navarra por última vez el pasado 30 de octubre de 2008, cuando hizo estallar un coche bomba en el aparcamiento del edificio central de la Universidad de Navarra en Pamplona. En el atentado contra la Universidad de Navarra resultaron heridas más de 20 personas, y también ocasionó numerosos daños en los edificios y vehículos del entorno del aparcamiento.
Antes de atentar contra la UN, y en los meses previos a que se declarase el último alto al fuego de la banda terrorista en 2006, ETA hizo estallar otro coche bomba en una discoteca de Urdax, que no ocasionó heridos pero que produjo numerosos daños materiales. Un año antes, en diciembre de 2005, los terroristas hicieron estallar una furgoneta bomba en otra discoteca, esta vez en Santesteban.
La banda terrorista cometió un atentado mortal en la Comunidad foral en mayo de 2003, cuando mató con una bomba lapa a dos policías nacionales en Sangüesa. El atentado acabó con las vidas de Bonifacio Martín Hernando y Julián Embid Luna.