... El martes, el Deportivo de La Coruña empataba a cero con la temible Juventus de Turín. Un empate que supo a poco porque el equipo que entrena Jabo Irureta tuvo contra las cuerdas a la "vecchia signora"; la mala suerte, y ese sexto sentido que salva a los italianos en el último suspiro apartó al Depor, al "Súper-Depor", de arrancar una victoria en Delle Alpi.
La Juventus salió escaldada de ese encuentro, e incluso Zidane, la "starlette" francesa, fue expulsado por intentar darle una coz al brasileño Emerson.
El Deportivo de La Coruña participa por primera vez en la Champions League, y lo hace por la puerta grande tras haber ganado (también por primera vez) la Liga española. Italia servirá de escaparate a este club gallego sobradamente conocido en nuestro país. No en vano el equipo que tuteó con descaro a la "Juve", que no se arredró ante uno de los pocos mitos futbolísticos del siglo XX, estaba hace muy poco luchando a brazo partido por ascender a Primera División.
La transformación del club que preside Augusto César Lendoiro ha sido supersónica. El Deportivo de la Coruña fue más tarde simplemente Deportivo, luego Depor y con Arsenio Iglesias, alias "el brujo", "Súper-Depor"; súper en todo, también en el gafe que le apartó de ganar un campeonato en el último segundo del último minuto del último partido. No había posibilidad de reaccionar, y una Liga que habían merecido Bebeto y compañía acabó viajando de rebote hasta la ciudad condal.
El Deportivo que brilla hoy tuvo su segundo nacimiento en 1988, en una histórica asamblea que se llevó a cabo en el Colegio de los Salesianos. En aquel momento la deuda era de 600 millones de pesetas (de entonces), y el club se había salvado agónicamente del descenso a Segunda B. En doce años el Deportivo de La Coruña se ha instalado definitivamente entre los elegidos; precisamente el mismo tiempo que han necesitado clubes históricos para desaparecer del mapa. Lo dicho: un Depor supersónico.
Depor supersónico
En Deportes
0
comentarios
Servicios
- Radarbot
- Curso
- Inversión
- Securitas
- Buena Vida
- Reloj Durcal