Finalmente, en el Perú se han definido los grupos que participarán en una de las elecciones más esperadas a la presidencia de la República. En total se han inscrito nada más ni nada menos que 17 listas, todo un récord en el país. Una de las posibles razones del “éxito de convocatoria” puede ser la confianza recuperada hacia el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), que ha emitido un padrón electoral finalmente depurado de muertos, militares, policías, presos y otros, producto de la maquinaría fujimorista-montesinista para perpetrar el fraude electoral.
Como es habitual, en muchos de estos grupos hay nombres poco conocidos. Buena parte de ellos, por su fragilidad o por no cumplir los requisitos del JNE --como el de no reunir el número de firmas que exige la ley para poder participar-- quedarán fuera de carrera en las próximas semanas. Sin embargo, otros reúnen las cualidades para llegar hasta el día de las elecciones, el 8 de abril.
Uno de los nombres más repetidos en los últimos meses ha sido el de Alejandro Toledo, que, desde las pasadas elecciones de mayo de 2000, ha seguido con su campaña, con intensos viajes por todo el Perú, el continente americano y Europa. Poco antes de la inscripción de su grupo en el JNE, se confirmó la alianza de su partido, Perú Posible, con el de Acción Popular (AP), agrupación de gran tradición en el país. De esta manera, Toledo tendrá a Raúl Diez Canseco, de AP, como candidato a la primera vicepresidencia y a David Waisman, congresista, en la segunda. Esta lista aparece, por ahora, en primera posición en todas las encuestas.
Otra alianza ha sido la del ex Defensor del Pueblo, Jorge Santiestevan de Noriega (Causa Democrática), con el grupo Somos Perú, del alcalde de Lima, y ex candidato a la presidencia, Alberto Andrade. Santiestevan encabeza la lista acompañado por Marina Sequeiros y el antropólogo Vladimiro Huaroc (su nombre acaso podría ocasionarle algún problema). Junto con Toledo, será uno de los principales favoritos.
Por otro lado, Lourdes Flores Nano se ha convertido en la primera mujer en presentarse a unas elecciones presidenciales en el Perú, gracias a otra alianza entre el Partido Popular Cristiano y la Unión Centro Democrático. Desde hace ya muchos años, Flores Nano ha sido una destacada congresista caracterizada por su seriedad y firmeza.
También estará en la lid un grupo tenido por fujimorista, a pesar de su empeño en negarlo. El ex ministro de economía Carlos Boloña se lanza a la presidencia junto con el historiador Pablo Macera y la economista María Fernanda Mendoza del Solar. Lo cómico es el nombre por el que han optado: Solución Popular. Lo único bueno de esta lista es que los electores peruanos podrán demostrar su rechazo y repudio a todo lo que ha estado ligado a Fujimori y Montesinos.
Esto último también se aplica para la candidatura del ex presidente del Perú, Alan García por las filas del APRA. Esperemos que el fenómeno de Carlos Andrés Pérez en Venezuela no se repita, y la agrupación también reciba un pobre porcentaje de los votos en muestra de la nefasta política que ejerció en el periodo 1985-1990 y que sumió al país en una gravísima crisis económica que seguramente aún se arrastra. No hay que olvidar tampoco que en su afán de que Mario Vargas Llosa no fuera elegido presidente en 1990, el APRA descargó toda su artillería y apoyó abiertamente a Fujimori.
Otras listas también resultan interesantes por su constitución, pero pocos les conceden alguna posibilidad. Fernando Olivera encabeza el Frente Independiente Moralizador (FIM) junto al ex alcalde de Lima, Ricardo Belmont Cassinelli y Eduardo Iriarte Jiménez. Uno de los grandes logros de Olivera fue el emitir el famoso video Montesinos-Kouri que generó poco después la debacle de Fujimori.
Como hemos dicho, muchas de las listas quedarán fuera de la pugna por no cumplir los requisitos del JNE. Entre ellas es posible que estén Capital Popular, Coordinadora de Unidad Nacional, Frente Independiente Regiones Unidas o el Movimiento Democrático Moralizador. El único digno de mención es el primero de ellos, liderado por el economista Hernando de Soto, que últimamente ha publicado “El Misterio del Capital”. Sin embargo, se presume que no conseguirá el número de firmas necesarias para su inscripción definitiva.
La suerte está entonces echada. Existe la esperanza de que el Perú haya registrado en su memoria todo lo ocurrido en los últimos años y que realice una votación concienzuda y seria, por su propio bien. En cuanto a los candidatos, es el momento de dejar las cintas en la cabeza y los discursos demagógicos y populistas para empezar a interesarse por los puntos importantes de sus programas, entre los que no pueden faltar la corrupción, la crisis económica y laboral y, por supuesto, Fujimori y Montesinos.
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