Pospores,
me quedo con esta frase tuya: "las lenguas no tienen derechos" (qué original, ¿de dónde la has sacado?)... sin embargo RECONOCES la necesidad de la OFICIALIDAD de ciertas lenguas. Tanto llamarme ceporro y empiezas por una contradicción que te retrata...
... porque si una lengua es oficial significa que los ciudadanos tienen CIERTAS OBLIGACIONES HACIA ELLAS (por ejemplo la de CONOCERLAS, como dice la Constitución) y que las autoridades tienen que garantizar que esas obligaciones se cumplen. En España, el Español tiene CIERTOS DERECHOS frente -por ejemplo- el Inglés (más allá de cuestiones prácticas, preferencias personales o invocaciones a la libertad de elección como bien absoluto).
Solamente quien rechaza el concepto mismo de "lengua oficial", y con ello renuncia a cualquier obligación legal del ciudadano hacia ella, puede afirmar que las lenguas "no tienen derechos". Tú no haces una cosa ni la contraria, porque no tienes las ideas claras entre tanta verborrea autoconvencida.
Lo cierto es que si es legítimo IMPONER EL CONOCIMIENTO DEL ESPAÑOL invocanto a su oficialidad, es exactamente igual de legítimo IMPONER EL DEL GALLEGO.
Por otro lado, en Galicia no se impone ninguna lengua a nadie. Si quieres hablar arameo con tu familia, eres libre de hacerlo. LO QUE SE EXIGE ES EL CONOCIMIENTO DEL GALLEGO A LOS NIÑOS en el sistema educativo, igual que se les exigen otros muchos conocimientos, entre ellos el ESPAÑOL. Es una IMPOSICIÓN perfectamente legítima, para usar tu propio argumento, dado que el gallego es lengua oficial a la par que el castellano. Y eso es de lo que va este artículo y tantos otros que confunden unas cosas con otras. La señora Losada decía en un artículo anterior que el ciudadano que usa el toponímico castellano para La Coruña "delinquía", lo cual es una burrada como un templo.
Por lo demás, la libertad es TOTAL en todos los ámbitos. Y diría que en la atención al público de la administración es mucho más común la discriminación del gallego-hablante que la del castellano-hablante. Si puedes demostrar lo contrario, hazlo, o cierra esa bocaza.
Veo que eres limitado para la ironía, pero te desenvuelves bien insultando a diestro y siniestro. Seguramente necesitas afirmarte como quien da puñetazos en la mesa para que parezca que tiene más razón.
No la tienes.
Muy acertada opinión. Lo terrible de la cuestión es que el sistema político actual (autonomías desbocadas sin bozal federal, ley electoral) permite la metástasis de la cosa hasta en los sitios en que uno menos se lo espera. Como por ejemplo en la quimera del estremeñu, el idioma inventado con el que los visionarios del protonacionalismo extremeño están "traduciendo" la Wikipedia. Un espanto.
Como ciudadano del área metropolitana de Barcelona, para mí no se trata de una disyuntiva entre una lengua y otra. Se trata de reconocernos como una mezcla de toda España y reconocer como propia de nuestra sociedad el castellano y por lo tanto, no poder elegir, sino sentirnos todos obligados a colocar en un lugar digno una lengua en la que todo el mundo se expresa con naturalidad, es la que nos sirve para el acceso al conocimiento y la información y es la que nos da una proyección exterior. ¿Que eso significa la desaparición del catalán? Eso querrá decir que el catalán carece de interés, por lo que bien desaparecido estará
No seas demagogo amadeus que ya se te ha visto el plumero en otars ocasiones. El chascarrillo como argumento no es gran cosa.
Una colección de mentiras y falacias es lo que escribes (como siempre):
"La libertad de elección no es fácil, no. En realidad es inviable, si entendemos por "libertad de elección" el que cada padre decida la lengua vehicular de su hijo en la escuela. Lo dicen los docentes y las APAS de Galicia."
Una cosa es lo que digan los directivos de las APAs de centros públicos (que no representan además a todos los padres), que siemprte han defendido el decreto vigente porque son de la mafia impositora y otra lo que piensan los padres. So con lo de los docentes te refieres a las Jusnats de Personal Docente resulta que no tienen competencia para pronunciarse sobre el tema y están controladas por los sindicatos favorables a la imposición lingüística. SU postura es ideológica, no técnica. GB ha demostrado cómo0 se puede cumplir la promesa de Feijóo de manera irrebatible. También la directiva de la FERE CECA está a favor del vigente decreto mientras que más del 80 % de los padres que llevan a sus hijos a los colegios de la FERE CECA están en contra.
"Por mi parte deseo que la lengua vehicular de mi hijo sea el inglés. Dado que ni gallego ni castellano gozan de derechos como lenguas oficiales de Galicia, y que la lengua inglesa es la única verdaderamente útil. ¿Se me puede negar ese derecho? Es más, quiero que mi hijo aprenda Chino Mandarín, porque le veo mucho futuro a China... tengo esa libertad, ¿no? ¿O acaso se me va a IMPONER el castellano o el gallego? "
Mayor cantidad de idioteces es difícil escribir. Las lenguas eb efecto carecen de derechos, pero su declaración de oficialidad en un territorio es lo que faculta, so ceporro, a un ciudadano para exigir la prestación de los servicios públicos en las lenguas declaradas oficiales. Y la decñaración de oficialidad no puede ser, en una democracia, ni arbitraria ni caprichosa, sino basada en la realidad social de ese territorio. Sólo un pefecto idiota puede afirmar que la lengua inglesa es la única veraderamente útil para cualquier persona y en cualquier parte: eso es ser más tonto que Pichote. La utilidad que cada lengua tenga para una persona ha de ser evaluada por ésta. Me parece muy bien que tú consideres como consideras al inglés (ignoro tu proyecto de vida, e incluso si lo tienes, teniendo en cuanta las bobadas que dices). Hasta los más estúpidos saben que existen límites presupuestarios que impiden ejercer cualquier opción lingüística en cualquier lugar (es que demuestras una burricie alarmante). Por supuesto, que al margen de su no declaración de oficialidad, si hay demanda suficiente de alumnos para recibir la enseñanza en inglés, la obligación en una democracia es como mínimo permitir esa posibilidad (y de hecho se permite) para quien pueda pagársela, y si hay medios incluso finaciarla con fondos públicos para aquéllos que deseasen esa opción. El estado está para facilitarle el mayor númer de opciones legítimas a los ciudadanos. No sé si estás capacitado para entender esto tan sencillo en una democracia. Cuenta cin mi apoyo si quieres relamar la existencia de clases en inglés para tus hijos (como no sean muchísimo más listos que tú, lo llevan claro los pobres).
"No, el debate no es IMPOSICIÓN o NO IMPOSICIÓN. El debate es si estamos dispuestos a viajar en el tiempo (hacia atrás), romper los consensos de la transición y convertir el gallego en una cuestión de conveniencia personal, a ver si de esa forma, desincentivando su uso, renunciando a su promoción en el ámbito educativo, DESAPARECE DE UNA VEZ POR TODAS."
¿Los consensos de la transición? Tú no sabes de lo que hablas. El primer modelo lingüístico tras la transición fue el modelo vasco de 1982, que era como el que pide GB para Galicia. Una cosa es desincentivar el uso de una lengua, so ceporro, y otro restringir el derecho a emplear otra que es oficial en la recepción de los servicios públicos. Por supuesto que el uso de una lengua es una cuestión de conveniencia personal en una democracia, donde las personas no estamos al servicio de ninguna lengua. Echa un vistazo a lo que ocurre en otros países con más de una lengua oficial a ver si aprendes algo. Por cierto, en democracia por encima de consensos y mayorías están ciertos principios no votables. En materia de derechos lingüísticos el derecho comparado es muy claro respecto a cuáles son estos principios. No tengo nada que consensuar con nacionalistas culturales que son personas de ideología totalitaria. Justamente si hay algo consensuado en las democracias - España no lo es realmente - en materia de derechos lingüísticos es que elige el ciudadano en qué lengua oficial se le atiende si hay varias en un territorio. Que no te enteras. La promoción,e n una democracia, es garantizar que el que así lo desee pueda empelar la lengua a promocionar la recepción de cualquier servicio público. Imponérsela a quien prefiere otra no es promoción, sino una restricción ilegítima (ya puede decir un parlamento lo que le dé la gana) de la libertad de los ciudadanos.
"Ya digo... mi hijo, INGLÉS. No estoy para imposiciones."
Es que eres tan ceporro que no sabes que toda norma es un texto articulado que establece derechos y deberes; es decir, imposiciones. La cuestión es si las imposiciones son legítimas o ilegítimas. Y en materia lingüística ya te he explicado antes de qué va la cosa en una democracia. Sólo un perfecto estúpido puede pretender que se le preste un servicio público en cualquier lengua en cualquier lugar. Incluso en el caso de lenguas oficiales puede ser requerida una demanda mínima que justifique el gasto efectuado por el estado (en la propia Finlandia al menos un 8 % de la población del municipio o 3.000 hablantes de la lengua minoritaria en él). Por favor, deja de hacer el ridículo amadeus, que das vergüenza ajena.
¿Y el conceto? Eso es lo peor de todo. Malos conceptos en mal espanglis y peor galinglis.
Pues no me parece mala solución. Y aún diría más: propongo que el inglés sea declarado lengua propia de todas las regiones de España. Esto colmaría de felicidad a la nena angloparlante de Rajoy y daría satisfacción a las obsesiones anglófilas de Esperanza (Hope) Aguirre.
En Galicia, inglés y gallego. En Cataluña y Baleares, inglés y catalán. En Aragón, inglés y catalán. En Vasconia, inglés y vascuence. En Valencia, inglés y velenciano.
en Asturias, inglés y bable. En Madrid, inglés y cheli; y en el resto de regiones castellanohablantes, inglés.
Además de solucionar el problema lingüístico de España, aprenderíamos todos a hablar inglés, que, como todo el mundo sabe, es la principal preocupación de los españoles. ¿OK?
La libertad de elección no es fácil, no. En realidad es inviable, si entendemos por "libertad de elección" el que cada padre decida la lengua vehicular de su hijo en la escuela. Lo dicen los docentes y las APAS de Galicia.
Por mi parte deseo que la lengua vehicular de mi hijo sea el inglés. Dado que ni gallego ni castellano gozan de derechos como lenguas oficiales de Galicia, y que la lengua inglesa es la única verdaderamente útil. ¿Se me puede negar ese derecho? Es más, quiero que mi hijo aprenda Chino Mandarín, porque le veo mucho futuro a China... tengo esa libertad, ¿no? ¿O acaso se me va a IMPONER el castellano o el gallego?
No, el debate no es IMPOSICIÓN o NO IMPOSICIÓN. El debate es si estamos dispuestos a viajar en el tiempo (hacia atrás), romper los consensos de la transición y convertir el gallego en una cuestión de conveniencia personal, a ver si de esa forma, desincentivando su uso, renunciando a su promoción en el ámbito educativo, DESAPARECE DE UNA VEZ POR TODAS.
Ya digo... mi hijo, INGLÉS. No estoy para imposiciones.
Sra. Losada: Creo que a estas alturas está para todos claro que el llamado Partido Popular está compuesto por acomplejados y cobardes. Está también claro que constituye uno de los fundamentos del régimen. No debe perder su temple de luchadora; combata también a éste como lo hizo con el anterior.
¿Y lo del "conceto"?
Una persona más instruída sabría que es una característica común de los gallegos el simplificar los grupos consonánticos (en palabras como septiembre o concepto), al igual que también abren y cierran las vocales, utilizan la /n/ velar y tienden a usar las formas simples de los verbos (entre otras características).
Es lo que hace que los gallegos "suenen" como tales. Lo mismo que los catalanes, los vascos, los madrileños, los extremeños, los andaluces o los canarios... los gallegos tienen peculiaridades en el uso del castellano. Se llaman variedades dialectales de una lengua, y solamente personas más bien reaccionarias e ignorantes consideran divertido estigmatizarlas.
Pero tranquilo, los gallegos no son laistas, loistas ni leistas. No se comen las "s" finales. No hablan con la zeta. No se confunden "hubiera" con "habría", ni tampoco dicen "ejque", ni cambian la "l" por la "r"....
Simplemente son gallegos y hablan español así. No especialmente peor que la gran mayoría.