
EEUU desarrolla el 61% de los medicamentos que consumimos, la UE, el 10%. Los medicamentos son caros por cuatro razones: son difíciles de inventar y de comercializar, el coste de inversión promedio es muy alto (2.000 millones de dólares) y tienen un camino peligroso y largo: sólo uno de cada 10 llegan al mercado, y los que lo hacen tardan más de una década.
Las ventas de la industria farmacéutica en EEUU representan el 70% de sus beneficios, pero sólo el 50% de las ventas, porque el precio de los medicamentos de marca en EEUU es tres veces más alto que el de la OCDE .
¿Por qué es esto?
En primer lugar, en EEUU no gustan los genéricos; el sistema favorece los medicamentos originales. Segundo, a pesar de que los medicamentos de marca son sólo el 7% de las prescripciones, se llevan el 90% del gasto- Además, los americanos disfrutan de la innovación mucho antes que los ciudadanos de otras naciones. Y finalmente, el sistema de negociación de precio en EEUU así lo favorece, ya que el 60% del exceso de beneficio se lo llevan intermediarios (hospitales, aseguradoras, distribuidores, y farmacias)
Trump tiene razón cuando dice que los americanos pagan más para que los demás tengamos medicamentos más baratos. Y para solucionarlo, en octubre lanzó el plan TrumpRx (RecetaTrump).
Ese plan conmina a los fabricantes a bajar sus precios hasta el precio más barato que un fármaco determinado tiene en el extranjero ( lo que se llama precio MFN: most favoured nation)
Pfizer, en el punto de mira del secretario de salud, Bob Kenedy Jr, ha sido la primera en plegarse a firmarlo; probablemente porque sus ventas a la aseguradora pública Medicaid son sólo el 5% de lo que vende en EEUU.
No han tardado en pasar por el aro todas las demás "Farmas", porque dependen más de las ventas que hacen a las aseguradoras públicas Medicare y Medicaid, y porque les ha chantajeado con los aranceles.
Pero las empresas tienen imaginación, y han encontrado maneras de solucionar el posible daño: una de ellas es poner los medicamentos en Europa a un precio americano, pero ofreciendo descuentos bajo cuerda. O atrasar el lanzamiento de los medicamentos en mercados más baratos, de manera que el precio MFN sea más alto.
Las consecuencias de la guerra de Trump contra las farmacéuticas no serán buenas para Europa. En primer lugar, la estrategia MFN ya está haciendo que se retrasen inversiones en empresas jóvenes. En segundo lugar, las compañías pueden aumentar directamente sus precios en Europa y olvidarse de esos contratos oscuros que tienen con los gobiernos. En tercer lugar, pueden retrasar el lanzamiento de sus fármacos innovadores en Europa.
Hay voces ,entre ellas la de The Economist [1] que piden que EEUU adopte el sistema europeo de evaluación coste-beneficio de cada fármaco. Muy optimista , dice que eso reflejaría las preferencias de los americanos por los medicamentos innovadores. Pienso que será lo contrario, e importará lo peor del sistema europeo, aumentando el poder del Estado y sus burócratas.
Pocas personas saben que este sistema pone un precio a la vida de cada uno de nosotros, y mide si el precio del fármaco compensa o no al Estado. En España, el valor de añadir un año de vida con calidad (AVAC) es de 30.000 euros.
El precio que los farmacoeconomistas (es decir, politicos) europeos ponen al AVAC es suficientemente bajo para que uno de cada cinco medicamentos aprobados en EEUU nunca llegue a Europa. En España, el último informe W.A.I.T. [2] señala que sólo el 50% de los medicamentos oncológicos aprobados en Europa están disponibles en España. Un fármaco contra el cáncer aprobado en Europa tarda 623 días en ser accesible en España.
Por otra parte, este sistema es opaco, ya que se producen negociaciones tras la cortina entre industria y gobiernos, lo que se presta a componendas de todo tipo. En resumen, Europa lo tiene difícil . Si el sistema "MFN" de Trump tiene éxito, los precios que los europeos pagaremos por los medicamentos serán más altos. Y si EEUU adopta un sistema "europeo" el retraso en el acceso está garantizado, y las compañias norteamericanas, las que más inventan, invertirán menos en innovación.
Así que prepárense, porque pase lo que pase, perderemos todos.
[1] Why the war on drug pricing will fail, The Economist, 4 Oct 2025
[2] https://www.farmaindustria.es/web/wp-content/uploads/sites/2/2025/05/EFPIA-Patients-W.A.I.T.-Indicator-2024-Final-110425.pdf
