
Para aquellos que amamos el tenis en general, es decir, individual, dobles, masculino y femenino, lo que se pudo ver ayer en la mal denominada batalla de los sexos entre Sabalenka y Kyrgios fue cuanto menos un insulto velado a este deporte. Y digo como mínimo y velado porque espero que como casi nadie le prestó atención no haga daño al deporte de la raqueta.
Lo que se jugó el Día de los Inocentes en Dubai fue aparte de una broma sin gracia, un auténtico circo. Una chorrada, por decirlo aún más claro. Y ojo, también una obra de caridad de Sabalenka con un jugador como Nick Kyrgios, que por mucho que moleste a sus fans será siempre recordado por ser el payasito del tenis. Con perdón de los payasos, por supuesto. Y no, no será recordado como el chico malo del tenis. Ese fue John McEnroe y él sí ganó títulos. Nick no pasó de ganar ATP 500 en categoría individual, por lo tanto, compararlo con el verdadero bad boy del tenis sería un insulto.
Esta batalla de los sexos ha sido una chorrada sideral. Colosal. Que la número 1 del mundo del tenis femenino, Aryna Sabalenka, se haya prestado a semejante humillación solo se puede entender por los millones que se ha echado al bolsillo, porque todo lo que rodeó al partido fue patético. La pista de Sabalenka se recortó para ‘igualar las fuerzas’ y además se impuso como norma que Kyrgios solo tuviese un saque, hecho que después se corrigió porque Sabalenka dijo que si él solo tenía uno, ella también. Así que pista recortada y un solo saque para cada uno. Tremenda pantomima.
Además de normas inventadas y extrañas, que solo hacían más circense y humillante el evento, Nick Kyrgios, fuera de forma toda su vida, pero ahora aún más, ganó a Aryna andando y sin haber jugado al tenis de competición en meses. ¿Por qué? Porque esta batalla es una soberana tontería como bien explicó nuestra Garbiñe Muguruza hace unas semanas. La extenista dijo sin tapujos y sobre todo sin miedos que en su mejor momento le habría ganado "un junior masculino". Esto no tiene nada que ver con el machismo ni con el feminismo sino con la biología, es decir, con el físico. El tenis masculino es más físico y más potente en los golpeos que el femenino y en cualquier duelo eso se va a imponer. Además el tenis masculino gana en saque, fuerza, potencia de golpeo y velocidad de piernas. Esto hace que aunque Sabalenka diese el 100% con poco que haga Kyrgios, se lo llevaba el australiano. Así fue. Paliza.
No hay debate en el mundo del tenis. No hay duelo por mucho que lo busquen. Y ojo, tanto ellos como ellas lo saben y nadie tiene ningún problema en reconocerlo dentro de la ATP y dentro de la WTA. Sabalenka también lo sabía, por supuesto, lo que pasa es que había que vender el circo para que ella y su acompañante ganasen dinerito navideño. De Kyrgios lo entiendo ya que para él es un privilegio que le paguen tanto por medirse a alguien que sí tiene títulos importantes en su categoría, pero de Sabalenka no. Número 1 del mundo y ganadora de tres Grand Slams, la bielorrusa no pintaba nada ahí. Ella en su categoría es la mejor y es estúpido intentar competir contra la otra modalidad que como digo está a años luz en el terreno biológico.
¿Saben lo peor de todo? Que nada de este partido ayuda salvo si eres la cuenta corriente de Sabalenka y Kyrgios. Tras esta victoria de Kyrgios, Aryna le ha dado armas de destrucción masiva a los que echan por tierra el trabajo de las tenistas en la WTA. A los que menosprecian el tenis femenino. Gracias a bailar la Macarena por unos cuantos millones, la número 1 del mundo ha logrado que un ejército que se frotaba las manos antes del partido lo siga haciendo ahora con el resultado del mismo. Que la mejor representante actual del tenis femenino haga esto es terrorífico y lo dice alguien que admira y sigue durante todo el año a Sabalenka.
Circo, chorrada, obra de caridad... Así fue la batalla de los sexos del tenis. Solo espero que esto se olvide pronto por el bien del tenis en general y del femenino en particular porque Sabalenka se ha vendido para ponerlo en duda. Por cierto, Aryna sabe tan bien la diferencia que existe que ya ha levantado la voz y ha dicho "no" a la inclusión del deporte trans en el mundo del tenis. Queda todo dicho.
