Un tocado de plumas que presuntamente perteneció a Jerónimo, el último de los grandes jefes guerreros indígenas en EEUU, es objeto de una disputa entre una tribu apache de Nuevo México, una tribu comanche de Oklahoma y el Gobierno Federal. La querella surge tras el arresto del abogado Leighton Deming, quien había intentado vender el penacho.
El tocado incluye 48 plumas de águila dorada, una de las especies en peligro de extinción y protegidas por el Gonierno de EEUU. Deming, al tratar de vender el objeto, fue acusado de infringir dicha ley que prohíbe el comercio en plumas de esa ave.
Tras conocerse el arresto de Deming, quien sostiene que heredó el penacho de su abuelo y que fue obsequiado a Jerónimo en 1907, la tribu apache de la Reserva Mescalero, cerca de Alamogordo en Nuevo México, presentó una reclamación para que el penacho le fuera entregado. Según ellos Jerónimo fue un jefe guerrero de todas las tribus apaches y el tocado debía ir al museo de las tribus.
Dos semanas después la tribu comanche de Oklahoma reclamación el tocado con el argumento de que los apaches no usaban penachos de plumas largas como lo hacían los comanches. Esta tribu argumenta que si alguna vez Jerónimo usó ese penacho, habría sido como préstamo, porque los comanches le dan un significado religioso y cultural tremendo a sus atuendos ornamentales y jamás hubiera obsequiado uno de ellos.
Por su parte, el fiscal federal Robert Goldman ha indicado que el penacho debería pasar a la jurisdicción del Departamento del Interior para que sea exhibido en algún museo o entregarse a la tribu que pueda probar sus títulos.
