La nave NEAR, que se posó el lunes con éxito en la superficie del asteroide Eros, a 315 millones de kilómetros de distancia, continúa activa y enviando información, dijeron este martes los científicos que controlan la misión. Pese al temor inicial de que la nave, que es similar a un satélite, pudiera quedar destruida en la maniobra, ya que no fue diseñada para un aterrizaje, las señales enviadas por NEAR confirman que, al menos, está en funcionamiento.
Eros tiene un tamaño de unos 33 kilómetros de largo por trece de ancho y es uno de los grandes asteroides cercano a la Tierra, aunque sus órbitas nunca llegarán a cruzarse. Los asteroides están considerados como parte del material sobrante de la formación de nuestro sistema solar y se cree que tienen las claves de cómo era la materia que formó los planetas, entre ellos la Tierra, hace casi 5.000 millones de años.
La nave NEAR, cuyo nombre significa en inglés Encuentro con un Asteroide Próximo a la Tierra, llevaba cinco años estudiando este enigmático cuerpo celeste, pero siempre a una distancia mínima de varios kilómetros.
Las imágenes revelan que la superficie de Eros, cuya gravedad es apenas una milésima parte de la de la Tierra, posee zonas arenosas y otras en las que se agrupan numerosos cantos rodados. Eros está salpicado de grandes cráteres y, extrañamente, algunos de ellos están ocupados por gigantes rocas con forma de cantos rodados que parecen negarse a abandonar su emplazamiento, pese a que las leyes física así lo deberían determinar.

ESPACIO
La nave que se posó en Eros sigue enviando información
0
comentarios
Servicios
- Radarbot
- Curso
- Inversión
- Securitas
- Buena Vida
- Reloj Durcal