
El primer disco compacto (CD) se lanzó hace ya 43 años, en 1982 en Japón "52nd Street" de la mano de Billy Joel y, aunque al principio era la forma más fácil para poder escuchar música, con el paso del tiempo los discos han id perdiendo su función. El motivo principal ha sido por la llegada de los formatos digitales y, sobre todo, por las plataformas para escuchar música online, sin embargo, todavía sigue siendo bastante común encontrar CD en la mayoría de las casas.
Un tesoro oculto
Los discos ya no son el método principal para escuchar música, pero mucha gente aún los conserva por varios motivos. En el caso de las personas que conservan sus CDs originales, puede que tengan un tesoro de gran valor y no lo sepan, ya que hay discos de artistas que se han revalorizado con los años, ya sea porque son ediciones especiales o limitadas, de artistas de renombre o porque ya no están en circulación. Las razones por las que un disco puede aumentar su valor monetario, en comparación con su valor original, son muchas, por ello, es conveniente revisar los discos que hay en casa antes de desecharlos.
Una segunda vida
Otra razón por la que se puede guardar un disco de este formato es por el material. La composición reflectante y brillante de los discos es fácil de reutilizar para hacer manualidades o crear nuevos objetos de decoración. Estas son algunas ideas prácticas que podrían servir para adornar la casa:
- Espejos: rompiendo los discos y pegando los fragmentos irregulares sobre la superficie de un marco, se puede crear un mosaico único.
- Relojes: añadiendo una maquinaria en la parte posterior de la superficie que no es reflectante se puede crear un reloj con un diseño muy singular y que probablemente nadie más tenga.
- Portaretratos: se recorta una fotografía en formato ovalado y se pega por el lado del disco que brilla. También se puede forrar el CD con papel adhesivo de diferentes estampados para simular marcos diferentes.
- Porta-pendientes: utilizando el núcleo de cartón de un rollo de cocina y varios discos se puede crear un colgador de pendientes totalmente hecho con materiales reciclados. Se deben perforar el centro de los discos e introducir el rollo de cartón de forma que los discos se queden de forma horizontal uno encima del otro, dejando unos centímetros de espacio entre ellos.
- Posavasos: se pueden plastificar para protegerlos y utilizarlos por el lado brillante o se pueden pintar y forrar para tener posavasos de diferentes estampados.
También pueden servir para dar un aspecto más retro a una estancia colocándolos de forma sutil en las estanterías del salón. Al final no deja de ser un artículo vintage que puede ser digno de coleccionistas en las manos adecuadas.

