
El verano tiene numerosas cosas buenas, como días de descanso, sol, calor, playa o piscina y más horas de luz, pero también algunas malas. Entre ellas están que las altas temperaturas hacen que aparezcan los molestos insectos, como las moscas, las avispas y abejas y, por supuesto, los mosquitos. Especialmente estos últimos, se convierten en el enemigo de millones de hogares y resulta complicado deshacerse de ellos.
De hecho, las picaduras de mosquitos acaban desesperando a los ‘elegidos’ por estos pequeños animales y su presencia acaba convirtiéndose en un calvario. Pero es posible ahuyentarlos sin productos químicos, siempre recordando que la humedad es uno de los grandes reclamos, por eso es crucial asegurarse de no dejar superficies mojadas ni recipientes abiertos con agua.
Los mosquitos pueden truncar un sueño profundo y reparador con sus zumbidos penetrando en el oído, acribillar la piel con sus picaduras o incluso transmitir infecciones o enfermedades graves como la malaria, el dengue o la fiebre del Nilo. Por suerte existen productos y remedios caseros tanto para ahuyentar y repeler a estos dípteros como para calmar sus picaduras.
Las picaduras
Estos insectos se alimentan de néctar y savia, si bien las hembras necesitan la ingesta de sangre de mamíferos y otros animales para llevar a cabo su ciclo reproductivo, en concreto, la puesta de huevos. La succión dura unos 10 segundos y puede dejar una reacción alérgica. Parece que las señales olorosas que emanan de la piel juega un factor clave para que haya personas más propensas a recibir estos picotazos.
Algunos estudios científicos apuntan a que son atraídos por el dióxido de carbono y el ácido láctico, pero también hay quien sostiene que la variedad y cantidad de bacterias en la piel de una persona, el género, prefieren la sangre de mujeres jóvenes y embarazadas, o incluso su grupo sanguíneo, predilección por el grupo sanguíneo 0, son determinantes a la hora de ser o no víctima de sus ataques aéreos.
Cómo evitar picaduras de mosquito
- Cubrir la mayor parte del cuerpo, utilizando pantalones largos y camisas de manga larga, calcetines y calzado cerrado. Mejor si las prendas son de colores claros.
- Utilizar repelentes de mosquitos con Dietiltoluamida, Icaridina, IR3535 o Citriodiol sobre la piel que queda expuesta.
- En menores de dos meses, emplear mosquiteras para cubrir las cunas y los carritos de los bebés, y evitar el uso de repelentes. En mayores de dos meses, priorizar también las barreras físicas y en caso de usar repelentes, se aconseja especialmente consultar las recomendaciones del fabricante.
- Es conveniente utilizar el aire acondicionado siempre que sea posible porque hace más difícil que haya mosquitos.
- No abrir las ventanas si no hay mosquiteras en buen estado.
- En ambientes domésticos, una medida adicional de protección es utilizar insecticidas.
Repelentes caseros para mosquitos
Los repelentes caseros para mosquitos pueden ser una alternativa eficaz y natural a los productos comerciales. Existen varias opciones basadas en ingredientes naturales que son conocidas por su capacidad para repeler mosquitos de manera segura y sin efectos secundarios dañinos.
- Aceite de citronela. La citronela es una planta cuya esencia tiene propiedades repelentes naturales. Para hacer un repelente casero, se puede mezclar aceite esencial de citronela con un aceite portador, como el aceite de coco o de almendra, y aplicar la mezcla en la piel. También se pueden usar velas de citronela para repeler mosquitos en áreas exteriores.
- Aceite de eucalipto. Este aceite tiene un aroma fuerte que los mosquitos encuentran desagradable. Se puede hacer un spray casero mezclando aceite de eucalipto con agua y aplicándolo en las áreas expuestas de la piel. Además, el aceite de eucalipto tiene propiedades antisépticas, lo que lo convierte en una opción doblemente beneficiosa. También se puede hacer una mezcla para usarlo para pulverizar en las habitaciones. Basta con diluir 40 gotas de aceite esencial de eucalipto en 200 ml de agua tibia, a continuación hay que echar la mezcla en un recipiente con aerosol. Agitarlo y pulverizar en los lugares de la casa que se quiera proteger de los mosquitos.
- Aceite de lavanda. Además de su aroma agradable para las personas, la lavanda es odiada por los mosquitos, por este motivo, se puede utilizar el aceite esencial directamente en la piel, o bien mezclarlo con un aceite portador. Además, se pueden plantar arbustos de lavanda en el jardín para mantener alejados a los mosquitos de la casa. Pero incluso se puede añadir aceite de lavanda a la crema diaria y aplicarla dos veces al día o hervir agua con lavanda, dejar enfriar y colar la mezcla. Luego verter la mezcla en una botella rociadora junto con alcohol para obtener un repelente.
- Manzanilla. Una infusión que puede convertirse en un repelente casero para repeler mosquitos es la manzanilla. Para hacer esta mezcla, basta con poner dos cucharadas de manzanilla seca y 500 ml de agua hirviendo. Reposar durante 6 horas y después se puede poner la mezcla en un recipiente con aerosol. Esta mezcla puede usarse tanto para pulverizar por las zonas que se quieran proteger de estos insectos como en la piel.
- Limón y clavo. Esta receta casera de repente de mosquitos es tan fácil como cortar un limón por la mitad y pincharle varios clavos de olor. Si se coloca este remedio en el dormitorio, los mosquitos no se acercarán, el motivo es que el aroma de limón repele a los mosquitos por su olor cítrico. Otra opción para repeler mosquitos con limón es diluir 40 gotas de aceite esencial de limón en 200 ml de agua y verter esta mezcla en un recipiente con aerosol, se agita bien y se pueden pulverizar las habitaciones, preferiblemente por las noches.
- Ajo. Consumir ajo regularmente puede ayudar a repeler mosquitos, ya que el ajo excreta compuestos sulfúricos a través de la piel. Aunque este método puede no ser agradable para todos debido al olor, es una opción efectiva. También se puede preparar un spray de ajo hirviendo dientes de ajo y utilizando el agua resultante como repelente.
- Menta y albahaca. Se pueden triturar las hojas de estas plantas y frotarlas directamente sobre la piel o preparar un spray mezclando el jugo de las hojas con agua.
- Vinagre. Los mosquitos detestan el olor del vinagre, por lo que se puede mezclar medio vaso de agua con un cuarto de vinagre blanco o de manzana y colocar la mezcla en recipientes cerca de las ventanas y puertas.
- Canela. El aceite de canela también actúa como un repelente casero contra los mosquitos adultos, sobre todo el mosquito tigre asiático. Además, los expertos afirman que el aceite de canela puede eliminar los huevos y sus larvas.
- Café. Se trata de un excelente repelente y una solución antimosquitos natural. Simplemente hay que recoger los posos del café y colocarlos en algún recipiente. Cuando estén totalmente secos, hay que quemarlos con una cerilla como si fuera incienso antimosquitos.
- Papel higiénico y aceites esenciales. Para preparar el repelente lo primero que es cortar pequeños trozos de papel higiénico y luego hay que escoger qué aceites esenciales se van a utilizar, los más adecuados son menta, lavanda, eucalipto o citronela. No hace falta mojar el papel con este líquido, basta con echar varias gotas. Después, distribuir el repelente por la casa colocándolos en ventanas, puertas y rincones.


