L D (Europa Press) "En menos de dos años Marruecos ha pasado de ser un país de emigración a un país de tránsito, y actualmente se ha convertido en un país de inmigración porque los subsaharianos que no pueden pasar a Europa se quedan en Marruecos", explicó, recalcando que en este país "la economía no tiene capacidad ninguna para digerir los movimientos migratorios".
"Por lo tanto lo que estamos haciendo es crear un problema humano, social, en Marruecos. Ahora se está gestionando como se puede pero hay que tomarlo muy en serio y esto ya supera con mucho las capacidades de Marruecos, y las capacidades de España. Esto tiene que ser un programa a nivel internacional", añadió. El embajador se expresó así en un encuentro convocado por la Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera, ante la próxima celebración de la Reunión de Alto Nivel Hispano-Marroquí los días 28 y 29 en Córdoba y Sevilla.
Azziman recalcó que en el marco "de la cooperación entre Marruecos y España y entre Marruecos y la UE se han hecho enormes esfuerzos para controlar mejor las salidas de quienes aspiran a atravesar el estrecho o a venir a Europa por otras partes" y que se han logrado resultados "impresionantes" en reducir las pateras y en "detenciones preventivas" en Marruecos. Esas cifras, continuó, reflejan que el 75% de quienes intentan llegar a Europa son subsaharianos que han llegado a Marruecos a través de Argelia.
El embajador recordó que estos países han vivido en los últimos años no sólo guerras, sino también casos de "pobreza aguda", de modo que la "única salida es que se organicen programas de desarrollo de los países que tienen dificultades". "La cooperación en todo lo que es control, vigilancia, fronteras, ha dado resultados, pero no resuelve el problema", explicó.
Respecto al fallecimiento de varios inmigrantes subsaharianos en el entorno de la valla que separa Melilla de Marruecos, sucesos que calificó de "dramáticos", el embajador recordó que a ambos lados de la frontera se están haciendo investigaciones y abogó por esperar a que se conozcan los resultados de "investigaciones serias, que determinen las causas de los fallecimientos y de quién fueron las faltas".
El representante marroquí se refirió también a la integración de los inmigrantes en sus países de acogida, y manifestó que la verdadera integración requiere esfuerzos muy a largo plazo e implica admitir que la economía nacional necesita inmigrantes, buscarles empleo y escuela y ayudarles a superar los problemas que afronten.
"España es un reto estratégico para Marruecos"
La inmigración será uno de los temas que los Gobiernos de España y Marruecos aborden en la próxima Reunión de Alto Nivel. Aunque los preparativos aún no están terminados, apuntó que está prevista la asistencia de una decena de ministros españoles y otros tantos marroquíes, de las carteras de Exteriores, Justicia, Interior, Educación, Cultura, Fomento y otras áreas económicas.
El embajador mencionó también los esfuerzos de lucha antiterrorista en Marruecos, recordando que los atentados del 16 de mayo de 2003 en Casablanca fueron un verdadero "choque" para un país que se creía "vacunado" porque ofrece "cauces para expresarse" a todas las tendencias.
Así, afirmó que entre las causas que alimentan el terrorismo Marruecos ha identificado algunas como la pobreza, la ignorancia o la exclusión social, y para combatirlas el propio rey Mohamed VI ha lanzado la Iniciativa Nacional de Desarrollo Humano (INDH) en la que participarán los poderes y actores locales. Otra vía de afrontar el extremismo, prosiguió, es "abrir el campo político a los que tienen una sensibilidad islámica para que pueda ser expresada" y se refirió al Partido Justicia y Desarrollo (PJD), que tiene "referencia islámica" y "acepta las reglas del juego democrático".
En este sentido, Azziman subrayó que le molesta "muchísimo" que se hable de "terrorismo islámico o terrorismo islamista" y pidió que "se rompa toda relación" entre ambos términos y no se relacionen por el hecho de que "criminales con motivación política quieran instrumentalizar el Islam para sus fines". El embajador defendió además la ley antiterrorista aprobada por Marruecos después de los atentados de Casablanca, criticada por demasiado dura por asociaciones de Derechos Humanos, destacando que comparada con otras leyes aprobadas por "sociedades mucho más arraigadas en la democracia", sus "derogaciones" o disposiciones excepcionales son mucho más limitadas.
En cuanto a otras iniciativas que se abordarán en la RAN, subrayó los preparativos del Año de Marruecos en España, que se celebrará en 2006, y avanzar sobre el proyecto de la 'Universidad de los dos Reyes', un centro universitario hispano-marroquí en Tetuán.