L D (Agencias) Este joven, de 15 años, contó que su pandilla suele reunirse en el lugar donde se produjo el accidente, a varios centenares de metros de la estación de la localidad y muy cerca del colegio público Oleza, en una zona donde está totalmente prohibido el paso de peatones.
Unos veinte chicos y chicas de entre 12 y 16 años, aproximadamente, accedieron el viernes por la noche a la plataforma del tendido ferroviario, como en otras ocasiones, a través de un agujero en el vallado que debe impedir el paso de los viandantes. Sobre las 21:15 horas, el Talgo que hacía el trayecto Barcelona-Lorca atropelló a uno de ellos que se había quedado rezagado y causó su muerte en el acto.
Un vecino que estaba anoche por las inmediaciones indicó que el boquete por donde entraron los niños "lleva bastante tiempo abierto" y agregó que es frecuente ver "movimiento de chavales que se reúnen" allí, informa Efe.
Por su parte, fuentes de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía explicaron que los primeros indicios recabados por la Policía Judicial apuntan hacia la hipótesis del accidente, en concreto a que la víctima iba charlando con dos amigos y no se dio cuenta de la llegada del ferrocarril. No obstante, este extremo será comprobado cuando se les tome declaración a los menores que acompañaban al fallecido.
Un juego
En un principio, varias fuentes manejaron la posibilidad de que los jóvenes estuviesen apostando por ver quién permanecía más tiempo sobre el tendido ferroviario en espera del tren. Aunque éste no ha sido el caso, de acuerdo con el menor entrevistado, los adolescentes del grupo de amigos de la víctima sí que habían practicado en ocasiones anteriores este tipo de juegos temerarios.
En concreto, el adolescente aseguró que a veces colocan una botella llena de piedras en medio de los raíles para saltarla cuando llega el tren, de forma que, en sus propias palabras, "el que tropieza ahí se queda".
