Plaza de toros de Pamplona. Feria de San Fermín. Octavo festejo de abono. Lleno total, de no hay billetes.
Toros de Victoriano del Río. Gran corrida de Victoriano del Río, astifina con cuajo y encastada, con tres toros francamente buenos y con mucha clase, primero, segundo y cuarto.
Curro Díaz, jienense de verde botella y oro. En su primero, muy bien con el capote de salida y con la muleta siete ayudados por bajo, llenos de torería. Faena sobre ambas manos, llena de aroma, estocada trasera, con el descabello mal, lo que le hizo perder una oreja, aunque a la faena le faltó contenido. En el cuarto, un gran toro, faena sobre ambas manos de fina estética, gusto y desmayo, dando pases de pecho a los que le daba mucho los vuelos. Cerró con trincherillas, pinchazo hondo y cuatro descabellos, perdiendo otra oreja. Mala tarde de Curro Díaz con el verduguillo.
El Juli, madrileño de azul y oro. En el segundo, muy bien en cuatro chicuelinas muy ajustadas. Después de brindar al público, gran faena en los medios, seis series sobre ambas manos de mucho mando y ligazón, de mano muy baja, viaje muy largo y enroscándoselo a la cintura, cambios de manos y circulares invertidos, cerró con una gran estocada. El presidente tenia que merendar y le dio una oreja, la faena era de de dos, pero El Juli está acostumbrado. En el quinto, un toro blandito que lo dejó de ser en la muleta de El Juli, siete series sobre ambas manos toreando extraordinariamente bien. Tuvo un momento de descuido y el toro le pegó una cornadita, parece ser en la bolsa del escroto. Estocada y otra oreja
Alejando Talavante, extremeño de verde y oro. En el tercero, después de brindar al público, montó una faena sobre ambas manos, muletazos largos y de mano baja ligando muy bien, pero le faltó rotundidad. Con la espada, como es habitual, mal. En el sexto, un toro que daba muchos cabezazos, poco pudo hacer.
Los Sanfermines están embalados al igual que los españoles, que gozada nos dieron ayer.