"Iba bebido, no sabía lo que estaba haciendo", se defendió el violador, según informa el Diario de Burgos. Mustapha Chekouh alegó además que "sólo le pegue dos bofetadas", que "no la llevé todo el rato sujeta del brazo hasta el Castillo" –lugar donde la violó– o que "no la agarré muy fuerte". Pero lo más insólito es que agregó que al terminar la violación se le pasó "la borrachera" y le dijo a la víctima: "ostia, qué estaba haciendo, perdona chica".
En el juicio admitió los hechos y reconoció que lo que había hecho "estaba mal". Claro que las pruebas de ADN no dejaban lugar a dudas de quién era el violador.
Según cuenta I. Elices en el Diario de Burgos, se preocupó mucho de restarle violencia a su agresión. Dijo que sólo "intentó violar" a la chica dos veces y que no le pegó una patada en la cara, como al parecer denunció la víctima."Llevaba tacones y al darme yo la vuelta después de ponerme ella la mano en el hombro, se tropezó con los adoquines y se cayó al suelo", declaró. Fiscalía, acusación y defensa han acordado pedir siete años por agresión sexual y uno por lesiones.
Según narra el periódico burgalés, los hechos ocurrieron el 27 de mayo de 2007, cuando el acusado encontró a la víctima en la calle y le preguntó: "¿Estás solita?". La llevó a golpes a un cerro y la violó.