
LD (Europa Press) Un toro de la ganadería gaditana de Fuente Ymbro que se quedó descolgado de la manada al final de la calle Estafeta ha sido el protagonista del tercer encierro de las fiestas de San Fermín, que destacó por su emoción y que se saldó con al menos un mozo herido con un puntazo en el abdomen, en el tramo de Estafeta.
El joven californiano W.M.D., de 22 años, corneado este miércoles en el encierro, ha sido intervenido quirúrgicamente en el Hospital de Navarra y se encuentra en estado grave, aunque su vida no corre peligro. El estadounidense, informa el Gobierno de Navarra en un comunicado, ha recibido en el tramo de Estafeta una cornada de doce centímetros en el glúteo derecho, sin penetración en la cavidad abdominal, y con fractura de la cresta ilíaca derecha, según el parte médico emitido por el servicio de urgencias del centro sanitario.
Tras ser operado, el joven ha pasado a planta, en el Servicio de Cirugía del Hospital de Navarra, aunque está pendiente aún de valoración por el Servicio de Traumatología. Asimismo, en el encierro de esta mañana, otro joven, O.P.P., de nacionalidad griega y 20 años, ha sido trasladado al servicio de urgencias del Hospital Virgen del Camino tras sufrir un traumatismo nasal a la altura del tramo del Ayuntamiento.
Su pronóstico es leve y no se descarta que reciba el alta hospitalaria en las próximas horas.
Tras ser operado, el joven ha pasado a planta, en el Servicio de Cirugía del Hospital de Navarra, aunque está pendiente aún de valoración por el Servicio de Traumatología. Asimismo, en el encierro de esta mañana, otro joven, O.P.P., de nacionalidad griega y 20 años, ha sido trasladado al servicio de urgencias del Hospital Virgen del Camino tras sufrir un traumatismo nasal a la altura del tramo del Ayuntamiento.
Su pronóstico es leve y no se descarta que reciba el alta hospitalaria en las próximas horas.
La carrera comenzó a las 8 en punto con la salida de la manada desde los corrales de Santo Domingo encabezada por los cabestros y a un ritmo muy rápido. Los toros, que cerraban el grupo, miraban a izquierda y a derecha mientras subían la cuesta, pero lo hicieron de forma limpia, sin embestir a los mozos. Una vez en la plaza del Ayuntamiento, la manada arrolló a un mozo que no podía seguir el ritmo de los animales. El grupo volvió a arrollar a numerosos corredores en Mercaderes, donde varios jóvenes se habían situado a la izquierda de la curva en lugar de a la derecha, como es habitual.
A partir de Mercaderes, un toro negro se puso por delante del resto y ofreció carreras preciosas a los mozos, que corrieron muy cerca de las astas. Por detrás, el grupo estaba encabezado por los cabestros, hasta que los toros apretaron y se pusieron por delante.
Al final de la calle Estafeta los seis toros se volvieron a hermanar y justo en ese momento, a la entrada de Telefónica, un toro se resbaló y se quedaría descolgado de sus hermanos hasta el final de la carrera. El animal miraba a los mozos que le citaban para guiarlo hasta la Plaza de Toros y avanzaba muy despacio y girándose constantemente, derrotando a izquierda y a derecha.

El momento más peligroso se vivió en la bajada al callejón, cuando el animal embistió contra uno de los pastores que trabajan a su cola para intentar facilitar la llegada del toro a la Plaza de Toros. El pastor se encontraba a la izquierda del vallado y contó con la ayuda de varios mozos y pastores. No obstante, no hubo incidentes de gravedad en este tramo, pese a lo peligroso de la situación, y el toro fue conducido finalmente con éxito hasta los chiqueros de la Plaza de Toros, donde se encontraban ya los otros cinco bureles. Las reses serán lidiadas a las 18.30 horas por los diestros El Cid, Sebastián Castella y Miguel Ángel Perera.

