L D (EFE) El vicepresidente de Filipinas, Noli de Castro, quien se personó en el lugar de la tragedia a las pocas horas, ha sido quien estableció la cifra oficial provisional de víctimas mortales. El directora de la Cruz Roja de Filipinas, Richard Gordon, declaró que es improbable que el número de muertos vaya a alterarse ya.
"Hay 342 heridos repartidos en cinco hospitales", precisó el senador Gordon, que estaba en el centro médico Rizal Medical Hospital para interesarse por el estado de las víctimas. Gordon indicó que en ese ambulatorio han ingresado a 222 heridos y que ninguno de ellos está grave, y añadió que según sus informaciones la situación de los demás afectados en los otros sanatorios es la misma.
El mandataria de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, ha ordenado que se abra una investigación para esclarecer cómo se produjo la tragedia. "La Presidenta ordenó un investigación inmediata y completa de la estampida de esta mañana y que se le presente el resultado en 72 horas", anunció el ministro de Información y portavoz de la Presidencia, Ignacio Bunye.
El punto de partida de la tragedia empieza con la celebración del primer aniversario del programa de televisión Wowowee, presentado por Willie Revillame, que en su breve andadura ha alcanzado una gran popularidad por los fantásticos premios que entrega a través de juegos. Para celebrar un año de vida, los organizadores, la cadena de televisión filipina ABS-CBN, habían anunciado que repartirían un millón de pesos (19.263 dólares), una casa y un coche, entre otras cosas. Además, se rifarían 20.000 pesos entre los asistentes al acontecimiento, cuya entrada era libre.
Desde el miércoles pasado empezaron a llegar filipinos al exterior del estadio de deportes ULTRA de Pasig, uno de los municipios que conforman la gran metrópoli de Manila, el lugar elegido para la celebración. En la mañana de este sábado, unas 30.000 personas esperaban a entrar en el recinto y salieron disparadas cuando las puertas se abrieron.
