El sacerdote Antonio María Cabrera, de 68 años, fue detenido el pasado 12 de junio —alrededor de las cuatro de la madrugada— a su llegada al Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM) acusado de presuntos abusos a un menor. Según la denuncia de la víctima, el religioso de los Legionarios de Cristo le habría agredido sexualmente en varias ocasiones a lo largo de los años en su propia casa, en el municipio de Naucalpan. En su último comunicado, la congregación pide que se respete la presunción de inocencia.
Las autoridades del país le acusan de al menos tres agresiones: en 2004, 2007 y 2011. La primera habría ocurrido cuando el denunciante tenía 6 años, han explicado sus abogados para Milenio Noticias. "Es una historia que refleja el caso de ciertos personajes de la Legión que se acercan a familias, que los arropan, que se ganan su confianza....", explica el letrado Santiago Contreras Gómez, "y durante todos esos años la víctima refiere haber sufrido esos abusos, aunque el proceso versa sobre esas tres fechas".
Se da la circunstancia de que Cabrera era uno de los sacerdotes del círculo cercano del Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo y reconocido pederasta (se le atribuyen más de 60 agresiones sexuales a menores). De hecho, asegura el abogado Julián Pérez-Duarte, "la persona que lo introdujo en la familia de la víctima, una vez que fallece el abuelo, fue Marcial Maciel". "Lo pone como guía espiritual de la familia" y "era una persona muy cercana" a ellos. "Iba de vacaciones, los iba a visitar seguido... Y esta era la forma en la que pudo cometer estos terribles hechos".
"Todos los abusos que hoy son objeto del proceso se dan en el domicilio de la víctima", asevera Contreras, "durante reuniones familiares o festejos en donde aprovechaba la distracción de todos los demás, en una casa que era de un tamaño considerable, para cometer esos actos". Hechos que la congregación de los Legionarios de Cristo se habrían negado a investigar, según el tercero de los abogados de la víctima. Patricio Mascareñas Ampudia asegura que es por ese motivo por el que deciden poner la denuncia el pasado mes de enero.
"Desde 2017, que la víctima empieza a hablar y a asimilar esta situación con ayuda de los psicólogos", relata el abogado Contreras, "se le comunicó (a los Legionarios de Cristo), a autoridades incluso del Vaticano en Roma". "Pero para sorpresa de la madre de la víctima, preocupada por que esto pudiera pasarle a otros niños", añade, "la respuesta fue: no te preocupes, debió ser una atracción muy puntual hacia tu hijo".
¿Quién es Cabrera?
El sacerdote detenido —que permanecerá en prisión preventiva hasta que terminen las investigaciones— está estrechamente vinculado a la Universidad Anáhuac de México, aunque a día de hoy ya no es posible encontrar ningún rastro del religioso en su web.
Antonio Cabrera fue director de la Facultad de Bioética de la Universidad Anáhuac de 2012 a 2021 y estaba al frente del Centro de Desarrollo Estratégico en Bioética de la mencionada institución desde 2022.
Pero —sin duda— una parte importante de su perfil tiene que ve con el hecho de que formaba parte del círculo más íntimo de Marcial Maciel junto a quien fuera capellán del colegio Highlands El Encinar de Madrid hasta su detención, conocido como el padre Marcelino.
Sobre el segoviano pesan ya al menos 8 denuncias por presuntos abusos sexuales a alumnas de primero de Primaria del mencionado centro escolar. Y se espera que ahora, tras su arresto, otras víctimas del mexicano se animen a emprender acciones legales contra él por hechos similares.
Del entorno de Maciel
En la imagen que acompaña a esta noticia, vemos al fundador de los Legionarios de Cristo presidiendo la mesa durante un viaje de su retiro dorado —después de que Benedicto XVI le impusiera una vida de penitencia y oración, en 2006—, que hizo con su amante, la hija que tuvo con ésta y varias de sus personas de confianza.
Entre ellas se encuentran precisamente el padre Marcelino (derecha), procesado por los abusos del colegio Highlands en Madrid, y el sacerdote Antonio Cabrera (izquierda), denunciado en enero por la violación de un menor en México. En cuando a Maciel, nunca fue condenado por las decenas de casos de pederastia que se le atribuyen.