Durante estos interminables meses me han llamado de todo, amigos y enemigos, por mi defensa de Donald Trump y por mi confianza en que acabaría ganando.
Se nos ha vendido que Trump era lo más parecido a Hitler desde el 45, así que habrá quienes estén temblando de miedo ante lo que nos espera. No hay por qué.
Es el actual presidente quien ha conducido a su país a este estado de frustración y desazón, que ha empujado al electorado a votar por una opción tan arriesgada.
Estos son los mimbres con los que Iglesias y Errejón quieren revolucionar España: personajes de ínfima categoría que protagonizan campañas infames sin una sola idea que merezca la pena.
Todos los ciudadanos y ciudadanas tienen derecho a un título educativo superior sin mayores esfuerzos o controles. Se podría otorgar en el mismo momento de nacer.
Trump es la prueba de que, en la era de las redes y de la exuberancia ubicua de las nuevas tecnologías de la comunicación, la Prensa es un tigre de papel.