Como en el sumario hecho público este martes no aparece implicada la presidenta de la Comunidad de Madrid, El País se encarga de hacerlo en sus páginas de opinión e información.
Según el diario de Prisa, Aguirre "tendrá que dar cuenta de las irregularidades cometidas desde su propio gobierno por consejeros que ella nombró para financiar actos en apoyo de su única y obsesiva ambición, a pesar de su insolidario amago de transferir la responsabilidad a otros sectores de su partido". Olvida El País que Aguirre expulsó sin temblarle el pulso a todos los implicados en Gürtel en la Comunidad de Madrid mucho antes de que el juez Antonio Pedreira tuviera a bien levantar el secreto de sumario, algo que no ha hecho todavía Rajoy.
En un ejercicio de cinismo, el editorial desmenuza el sumario que dice "ha comenzado a conocerse a través de la publicación" cuando fue este mismo periódico el que ya lo hizo público hace un año a través de filtraciones. Eso sí, matiza la contundencia de Leire Pajín y tilda al caso Gürtel de "uno de los más graves escándalos de corrupción conocidos en España". Menos mal que ha tenido los escrúpulos de no olvidar Filesa, Roldán, o el saqueo de los Fondos Reservados de los gobiernos de Felipe González.
Da por hecho que "el PP se ha financiado irregularmente mientras se permitía dar lecciones de honradez a las restantes fuerzas políticas", algo que no está ni mucho menos probado.
Señala que "dirigentes populares… todavía siguen en sus puestos, o, pero aún, colocados a resguardo y protegidos por la dirección del partido", en referencia a Bárcenas y a Camps.
Y sentencia que si el PP llega al Gobierno "la voluntad general quedaría bajo la amenaza de una red de delincuentes y de los dirigentes políticos que, estando en la oposición, se avinieron a tratar con ellos".