Las pequeñas cadenas de televisión, locales, temáticas y de pago están, poco a poco, ganando terreno a las generalistas. Si no fuera porque la información y crítica de programas en prensa escrita y radio se centra en lo que ofrecen las tres grandes: TVE, Antena 3 y Tele 5, porque su máquina de promoción es más potente, el avance de “las otras”, esas que hace un año rondaban el 1% de la audiencia y ahora el 6%, sería mucho mayor. Si a esto unimos que las cadenas autonómicas se han asentado, e incluso superado marcas anteriores, podemos convenir con la consultora “GECA”, la empresa más solvente en análisis de televisión, que los hábitos de los telespectadores españoles están cambiando.
El caso extraordinario de “Operación Triunfo”, que ha llegado a los 7 millones de audiencia --ya nadie piensa en conseguir los 10 millones de telespectadores de “Médico de familia"-- es un fenómeno aislado. El número de fracasos de las grandes cadenas el año pasado en programas de nueva creación fue más que elocuente. Tan sólo uno de cada seis estrenos funcionaron, es decir, que tuvieron una cuota de pantalla igual o superior a la media de la cadena. Con este panorama, si no fuera porque TVE, Antena 3 y Tele 5 han tenido un buen año en la facturación publicitaria robándoles campañas a radio y prensa, el balance hubiera sido definitivamente negativo.
El análisis de GECA, que ha adelantado ABC, aunque otros periódicos también cuentan con sus servicios, deja claro que la tendencia a una diversificación de los gustos del telespectador hará cambiar las estrategias de los grupos de comunicación y de las propias cadenas generalistas, que se han instalado en la inercia. Es el caso de TVE, pero también de Antena 3 y Tele 5, que prefieren ir a lo seguro y no aciertan a producir novedades que enganchen. El futuro es la cercanía de la noticia y la televisión a la carta. Si no fuera porque en España la televisión de pago sigue siendo impopular, “las otras” devorarían como termitas a las tres grandes.
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