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LA LLAMADA DE RAJOY A COSPEDAL

LD (Pablo Montesinos) "La corrupción acorrala al PP". Así abría el sábado su edición el diario El País. Público calcaba el titular, y hablaba de un futuro negro para el principal partido de la oposición. Esa misma mañana, el presidente de los populares, Mariano Rajoy, visitaba COPE Barcelona, pero rehusaba hacer ninguna declaración sobre el presunto escándalo. Posteriormente, se trasladaba a Bussigny, Suiza, para hacer campaña por Núñez Feijóo y, nuevamente, ignoraba la teórica trama. Sin embargo, ya por entonces había dado órdenes a su secretaria general, María Dolores de Cospedal, para que convocara una rueda de prensa extraordinaria para el domingo.
 
Según ha podido saber Libertad Digital, en esa conversación telefónica -no hubo reunión personal-, el presidente del partido le transmitió las pautas de su intervención. Poco antes, Esteban González Pons allanaba el terreno y acusaba al PSOE de usar a la Policía, a ministerio del Interior y la Fiscalía para aniquilar al PP.
 
Mariano Rajoy evitaba dar la cara y mandaba hacerlo a su número dos, que en una rueda de prensa sin precedentes denunciaba "en voz alta" la campaña de "acoso y derribo" orquestada desde Ferraz.
 
"Medios del Estado" para acabar con el PP
 
María Dolores de Cospedal ha sido contundente. Ha acusado al PSOE de utilizar "medios del Estado" para eliminar al principal partido de la oposición. "Es una campaña de acoso y difamación en un periodo próximo a las elecciones", ha exclamado.
 
Recuerda que las filtraciones "parciales e interesadas" que aparecen este domingo en los medios de comunicación provienen de "un sumario secreto", por lo que son constituyentes de "responsabilidades penales". Se refiere la secretaria general de los populares a lo publicado por El País, que recoge teóricas grabaciones "que obran en el sumario abierto por el juez Baltasar Garzón". Dice el rotativo progubernamental que "el jefe de la trama se jacta de controlar ayuntamientos del PP".
 
Para Cospedal, filtraciones como éstas son "escandalosas" y ponen de manifiesto que "la maquinaria del PSOE está utilizando los servicios de la Fiscalía y de Interior con un claro interés electoral".
 
 
Por ello, el PP ha exigido al Poder Judicial que tome "las medidas necesarias para evitar que se sigan filtrando datos interesados", ya que no va a consentir "que se quebrante el Estado de Derecho acusando a un partido de provocar algo que no ha provocado".
 
El pasado oscuro del PSOE
 
Tanto en su intervención, como en el turno de preguntas, la dirigente popular se ha afanado en recordar el oscuro pasado del PSOE, "condenado en sentencia firme por robar fondos reservados y financiar ilegalmente a su partido". No se ha olvidado del GAL y tampoco de Filesa. "No vamos a consentir que el PSOE nos dé lecciones de honestidad en las cuentas públicas, ni de transparencia ni de claridad", ha sentenciado.
 
"Todo es una campaña de humo para tapar los más de tres millones de parados y el escandaloso gasto del presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño", ha añadido.
 
Mensaje a las bases del partido
 
No es el mejor momento del PP y bien lo sabe su secretaria general. Por ello, sus últimas palabras han ido destinadas a los simpatizantes y militantes del partido. A ellos les ha dicho que quiere trasladarles "un mensaje de confianza". "En el PP no nos vamos ni a rendir ni a achantar ante estas campañas de difamación y acoso... tienen que tener el ánimo muy alto, somos el partido que ha defendido siempre la libertad, la claridad y la transparencia", ha asegurado.
 
"El PP va a dar lo mejor de sí para que en España deje de gobernar quien utiliza las instituciones en beneficio propio para ganar las elecciones", ha aseverado, para después advertir: "es un grave riesgo para el Estado de Derecho". "Tenemos que seguir trabajando, la unión es la fuerza ahora más que nunca", ha afirmado.

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