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Antonio Carmona se casó dos veces... con su misma esposa

Tras 20 años con Ketama y desempeñar ahora tareas de solista, Antonio Carmona vive una segunda juventud con su esposa. 

Tras 20 años con Ketama y desempeñar ahora tareas de solista, Antonio Carmona vive una segunda juventud con su esposa. 
Carmona y Orellana, en Cádiz | Gtres

Bonita historia sentimental la de Antonio Carmona, uno de los últimos grandes renovadores del flamenco, que fuera componente de Ketama. Resulta que se casó por lo civil con Mariola Orellana en los primeros años 90. Pero él le prometió que más adelante celebrarían otra ceremonia religiosa, en Tierra Santa, lo que fue retrasándose. Pero, fiel a su palabra, el guitarrista y cantante viajó con su querida esposa en 2012 a los Santos Lugares y allí celebraron ese acontecimiento. Una "reboda", que dicen algunos; o segundas nupcias, pero con la misma mujer, que ha sido y continúa siéndolo "el amor de su vida". Tienen dos niñas, Marina y Lucía, que son la alegría de su casa. Y ellas también tienen alma de artista, sobre todo, como dice el embobado padre, la pequeña, a la que asegura se le ocurren ya canciones propias. Porque han recibido clases de música en Miami, donde vivieron con la familia cuatro años, y en Inglaterra. De momento no se han decidido a actuar en público profesionalmente. Antonio Carmona prefiere que lo hagan cuando estén más curtidas, y se suban con él a un escenario con mayor seguridad.

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Antonio Carmona y Mariola Orellana | Cordon Press

Antonio Carmona nació en Granada en el seno de una saga de artistas gitanos de prestigio, los Habichuela. Con el trío Ketama permaneció veinte años, creando una revolución en el nuevo flamenco: "Nos llamaban herejes por utilizar la guitarra flamenca en el martinete, o la batería". Por la historia de Ketama pasaron, además de él, su hermano Juan y José Miguel, su primo; Ray Heredia y José Soto "Sorderita". A mí me dijo un día Antonio Carmona que el nombre de Ketama procedía de tierras africanas, del Valle del Rif, aunque luego resulta que en realidad era como se llamaba el perro de raza dóberman que tenía un tipo que trapicheaba con drogas. Por asociación, pienso yo, entre el nombre y la procedencia de esas sustancias, situaron Ketama en lo que les pudiera llevar a esos "paraísos artificiales". No sé si se me entiende…Lo del apodo de uno de sus elementos, José Heredia, hijo de un bailaor llamado maestro Josele, le viene de que estando con un menda de Alicante, éste, bromeando le dijo que era más peñazo "que el anuncio de Raid", el gas ese que mata a los mosquitos. Y de aquello surgió el apodo, transformado en "Ray", que resultaba más eufónico: Ray Heredia.

Uno de los primeros éxitos de Ketama fue con "Vente p´a Madrid", título rumbero que les vino en cierta ocasión que José y Antonio Carmona le dijeron eso mismo a un primo suyo, invitándolo a que viajara a verlos a la capital, con un instrumento musical, su cajón. Ketama fue el grupo, junto a los Pata Negra, que llevaron a las discotecas a jóvenes que estaban "enrrollados" con el pop, pero no con el nuevo flamenco. Uno de los hitos que Antonio Carmona no ha podido olvidar es cuando Tomatito, el guitarra que sustituyó a Paco de Lucía como acompañante de Camarón de la Isla, le pidió que se uniera a él y al Camborio para hacer "de teloneros" de Frank Sinatra, en una gala que hizo "la Voz" en el barcelonés Palau Sant Jordi. Pero para "flipar" también es cuando los contrataron para el mismo papel de actuar antes que el protagonista de la noche y "calentar" al público: en la gira que hizo Prince, por Madrid, Barcelona y Valencia. Lo que no consiguieron es cruzar la más mínima palabra o saludo con él. En cuanto Prince acababa su "show" unos negrazos como armarios se lo llevaban en volandas fuera del escenario hasta su camerino y luego el ídolo se subía a su impresionante "Jaguar".

Transcurría 1990 cuando sacaron al mercado "Y es ke me han cambiado los tiempos", así con esa grafía de la k, lo mismo que después sucedió con "No estamos lokos". Ketama se formó con los antes citados Juan, Josemi y Antonio Carmona. Ray Heredia moriría por tomar heroína adulterada. Y José Soto "Sorderita" voló después por su cuenta como solista. Ketama continuó funcionando en 1992 cuando Michel Camilo les organizó con él mismo una gira en 1992. Y Antonio y su hermano Juan repitieron lo de ser teloneros junto a Tomatito nada menos que de Elton John. Todas esas experiencias qué duda cabe les sirvieron para ir incorporando a su música nuevos sonidos que, sin desvirtuar el flamenco puro del todo, era otra cosa, más actual, que seguía encantando a su juvenil clientela, la que nunca hubiera entrado en un "tablao" a escucharlos, pero sí a una discoteca, una plaza de toros o un estadio. Y hasta se dieron el gustazo de grabar en los mismísimos estudios londinenses de Abbey Road: ya saben, aquellos que inmortalizaron Los Beatles.

Y ya, en los primeros años del nuevo siglo XXI se fue desinflando la estela musical de los Ketama y sus discos comenzaban a venderse menos, por diversas razones ya harto conocidas de la crisis de la industria. Y sus miembros se fueron cada uno por su lado aunque no rompieran la relación, además siendo familiar. En el caso principal que nos ocupa Antonio Carmona probó suerte en solitario. Y no puede quejarse hasta la fecha. Está reciente su tercer disco como tal, él solo. Se titula "Obras son amores". Ha contado con las colaboraciones de Alejandro Sanz y De Juanes. Once canciones entre las que más se escucha este verano es "Mencanta". Le trae un recuerdo triste. Cuando la estaba ensayando, porque él es autor de todo el disco, su padre, el gran guitarrista Juan Habichuela, estaba a punto de morir, de esto hará cerca de un año. Pudo despedirse de él, quien abrazándolo pronunció sus últimas palabras. El veterano artista flamenco creía mucho en el futuro de su hijo. Que es una persona muy simpática y afable, a la que le gusta sentirse querido por los suyos, por los amigos de siempre con los que es feliz jugando a las cartas o al dominó, entre cerveza y cerveza. No entiende el odio, la mezquindad de alguna gente, los ataques que alguna vez ha recibido injustamente, vía "twitter". Es muy familiar. Y tiene la suerte de que su esposa, Mariola Orellana, es su "mánager", en una oficina que lleva también la contrataciones de otras artistas desde hace tiempo, como Lolita y Rosario Flores, Niña Pastori y otros artistas.

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