Rocío Flores se niega a seguir alimentando el show mediático que ha encabezado su madre Rocío Carrasco desde el estreno del documental que protagoniza en Telecinco. Hace unas semanas la joven aseguró que ha dejado de ver los capítulos y ha optado por no escuchar el testimonio que tanto daño le está haciendo. Este miércoles por la noche ha vuelto a demostrar en sus redes sociales que no iba a ver el último capítulo de la docuserie con la publicación de una imagen muy representativa.
Con aparente tranquilidad y sonriendo frente a la cámara, Rocío Flores ha compartido una fotografía en la que aparece recostada en la cama con el texto: "Kao, buenas noches. Vida 1 – Rocío 0". Con estas palabras, Rocío vuelve a plantar a su madre e intenta mantenerse al margen de todo lo que tiene que ver con la serie en la que tantos detalles se han hecho públicos sobre su adolescencia.
En el último capítulo, Rocío Carrasco se mostró especialmente cruel con su hija, negando que sus súplicas y sus lágrimas en televisión sean reales. Según Rocío, no existe nada al azar en la palabras de su hija y aseguró que todo responde a una estrategia de Antonio David para seguir sacando rédito económico: "Las apariciones en televisión de mi hija están guionizadas por su padre". "Ha dado una imagen falsa de niña desamparada de niña abandonada por su madre".
"Me pongo por delante de mis hijos porque creo que ya está todo perdido", comentó sobre la relación con sus hijos. "En un futuro no lo sé, pero en un presente lejano está perdido".