
La crónica rosa de Es la mañana de Federico contó con Isabel González, Daniel Carande y Carlos Pérez Gimeno para tratar todos los temas de la actualidad rosa. Como la entrevista del escultor Nacho Palau a la revista Diez Minutos contando, tras años de silencio, los pormenores del final de su relación con Miguel Bosé y el doloroso juicio por la filiación de sus cuatro hijos.
Una entrevista -tal y como relató el periodista Daniel Carande en esRadio- "que se lleva gestionando desde noviembre", la fecha en la que Miguel Bosé publicó su libro El hijo del capitán Trueno, y que se realizó "el pasado jueves por un equipo de Diez Minutos que se desplazó a Valencia".
Allí, en una casa rural, vive Nacho Palau con sus dos hijos. Cuando los tres profesionales de la revista llegaron -"tres mujeres, la estilista, la redactora jefe y la fotógrafa"-, el ex de Bosé "estaba tan nervioso que nos puso un desayuno enorme y el pobre decía que nos lo comiéramos todo, solo para retrasarlo por los nervios".
El vídeo que se incluyó en la entrevista, además, "se tuvo que cortar cinco veces porque Nacho Palau empezaba a llorar. Era ya el final del día". La casa de campo donde Palau reside, eso sí, es una "casa estupenda, cuidadísima".
Palau, por último, solo puso una exigencia a la entrevista, y fue para la estilista: "No quería nada de ropa cara. Ropa de Zara, de Cortefiel, marcas habituales", contó Carande sobre Palau que, además, está vacunado y va a vacunar a sus dos hijos, una postura contraria a la que ha llevado recientemente a Bosé a los titulares respecto al coronavirus.
Unas declaraciones emocionales y delicadas que, además, "hay que leer entre líneas; esa entrevista antes la leen unos abogados para evitar demandas".
