El pasado viernes Marisa Jara cumplió el sueño de su vida al convertirse en madre por primera vez a los 42 años después de una durísima y larga lucha por quedarse embarazada tras sufrir un cáncer y varias operaciones. Un niño muy deseado llamado Tomás que nació en Sevilla y al que hoy la modelo, acompañada por su pareja, Miguel Almansa, y emocionada hasta el punto de no poder contener las lágrimas, ha presentado a su salida del hospital.
Radiante con un vaporoso vestido verde, unas cómodas deportivas y sin dejar de mirar ni un segundo a su bebé, Marisa nos ha contado emocionadísima cómo fue el parto y cómo se encuentra en estos inolvidables primeros días junto a su hijo.
"La verdad es que estoy loca de contenta y emocionada todo el tiempo", ha dicho una orgullosa Marisa Jara, que a continuación describió cómo fue todo el proceso a los reporteros en la puerta de la clínica. "La verdad es que ha sido un parto por cesárea y un poquito complicado, pero estas cosas son así. Hay veces que son más sencillas, otras veces son más complicadas pero lo importante es que todo ha salido bien".
El bebé ha pesado 4.3 Kg y, según la modelo, "es muy bueno, es un niño muy bueno, muy tranquilito". Tantas ganas tenía de ser mamá que Marisa se ve ya como "la mejor madre del mundo". Sin inseguridades, porque "han sido muchos años y tanta lucha, buscándolo". "Esta semana ha sido muy intensa. ha sido un shock para mí el verlo y el tenerlo, me emociona mucho", ha contado.
A Miguel le da un "diez" como padre, y en su familia están todos "locos de contentos". "Con su muñequito y todo el día viéndolo, le mandamos todo el día fotos y muy contentos -dice sobre sus padres-. Y Miguel, el mejor padre del mundo. Mira, ha tardado pero Dios me lo ha puesto para mí".