Alina Kabaeva, la ‘amante oficial’ de 38 años de Vladimir Putin cuya relación se conoció en 2013, ha reaparecido en un acto público tras semanas de especulaciones sobre su paradero, desde que comenzara la invasión rusa de Ucrania. Fue el pasado sábado durante los ensayos de un evento benéfico celebrado en el UTB Arena de Moscú.
Las recientes imágenes de la pareja del mandatario ruso las publicó en Instagram Ekaterina Sirotina, entrenadora de la selección juvenil de la Federación rusa de gimnasia rítmica. Alina aparece de lo más sonriente y relajada, vestida con una americana negra de lunares blancos y una blusa blanca con pedrería en el cuello.
Pero lo que más ha llamado la atención de su reaparición es su cambio físico. Algunos medios como el británico Daily Mail apuntan que Alina se ha sometido a numerosos retoques estéticos en la cara, algo a lo que también es aficionado Putin. La edición rusa de la revista Cosmopolitan comentó la reaparición de la gimnasta evitando vincularla con el mandatario para sortear la censura. "Alina Kabaeva es una de las mujeres más misteriosas y reservadas de nuestro país (...) La gimnasta casi nunca aparece en público, no aparece en las redes sociales, y no es posible verla accidentalmente en la calle o en los centros comerciales", escribe.
En los canales de Telegram de Rusia también se cuidan de la censura aunque van más allá, insinuando incluso que Alina Kabaeva y Putin comparten el mismo cirujano plástico. "Una nueva aparición rara de Alina Kabaeva. Esta vez está vestida de manera informal y nuevamente se la ve con un anillo de bodas. Y sí, el toque de la esteticista de la familia es bastante notable", bromean.
No es de extrañar que Alina haya aparecido en un evento de estas características ya que aunque está retirada, sigue apoyando la disciplina con la que alcanzó la gloria. La gimnasta abandonó las competiciones en 2004 y es una de las mujeres más condecoradas de la historia. Conocida como "la mujer más flexible de Rusia", tiene en su palmarés dos medallas olímpicas, 14 medallas en campeonatos mundiales y 25 medallas en campeonatos europeos de gimnasia rítmica.
Al contrario que ocurrió con María y Katerina, las hijas ‘oficiales’ de Putin, Kabaeva no ha sufrido ninguna sanción económica. Las últimas informaciones sitúan a su pareja refugiada en Suiza en una vivienda blindada junto a los cuatro hijos que presuntamente tienen juntos. Según el medio estadounidense Page Six, todos ellos tendrían pasaportes suizos.
Una petición lanzada por ciudadanos de Rusia, Bielorrusia y Ucrania hace dos semanas pide a las autoridades suizas que expulsen a Kabaeva del país y la deporten de regreso a Rusia. El llamamiento, que describe a Kabaeva como la "esposa favorita del delirante dictador y criminal de guerra Putin", ha alcanzado desde entonces más de 73.500 firmas.
Vladimir Putin's 'lover' reappears with a 'new look' in Moscow https://t.co/LFf7Pg7u8H
— Daily Mail Online (@MailOnline) April 22, 2022
Putin y Kabaeva han sido fotografiados juntos en varias ocasiones. Las investigaciones del opositor encarcelado Alexei Navalny revelaron que en los últimos años varios oligarcas rusos han obsequiado con propiedades, dinero y otros activos a la familia de la gimnasta. Los primeros rumores sobre su romance comenzaron en 2008, cuando ejercía de diputada favorable al Kremlin. El periódico que publicó su noviazgo se cerró rápidamente. "Tengo una vida privada en la que no permito interferencias", defendió en 2013 cuando se anunció su divorcio.