
Kiko Rivera ya está sacando tajada de su ictus en la prensa del corazón. El DJ está creando nuevos problemas familiares a 4 días de haber sido ingresado asegurando que ni su madre ni su hermana van a poder visitarle.
Por eso, Kiko ha estallado de nuevo en Instagram asegurando que su "madre no va a venir, y mi hermana muchísimo menos, así que déjenme recuperarme, os lo pido por favor".
"Manda narices que tenga yo que estar dando explicaciones de quién entra o no entra en mi casa", ha dicho muy malhumorado, pidiendo que "por favor", le dejen "descansar y recuperarse".
Una reacción que ha causado un inmenso dolor en Isabel Pantoja, que creyó que su hijo estaba dando los primeros pasos para un acercamiento familiar tras renunciar a la herencia de Paquirri. Publica la revista Semana en portada que la cantante está "destrozada" tras el rechazo de su hijo.
En todo caso, ahora lo primero para Kiko es cambiar su estilo de vida drásticamente, dejando de lado tanto el azúcar como el tabaco, dos hábitos perjudiciales para su estado de salud.
Pero una de las recomendaciones médicas que de momento no ha podido cumplir, es salir a caminar habitualmente. El cantante ha pedido a los medios de comunicaciónque abandonen la puerta de su hogar: "Váyanse de mi casa que pueda salir a dar un paseo como me ha mandado el doctor".
Hay otra cosa que ha enfadado especialmente a Kiko Rivera: que se diga que su mujer Irene Rosales está tomando las decisiones. "Todavía me funciona la cabeza para tomar decisiones no inventen ni hagan daño después de una situación tan delicada como la que acabo de pasar. Solo soy una persona a la cual le ha dado un ictus, respétenme y déjenme recuperarme".

