
Joaquín Torres despidió el 2023 de la peor manera tras sufrir un grave accidente de moto y abandonar de mala manera el programa Espejo Público tras un enfrentamiento en directo. Muy recuperado, el arquitecto ha concedido su primera entrevista tras ser operado a consecuencia de una pelvis rota por varios sitios y las lesiones en hígado y pulmones que le provocó el atropello.
En una charla con Diez Minutos, Torres celebra estar "vivo y recuperándome" tras pasar por el "momento físicamente más doloroso" de su vida. El accidente se produjo en la calle Alcántara de Madrid cuando un coche salió de un garaje sin mirar y se lo llevó por delante. "Percibí una ausencia absoluta de control y nunca más volveré a tenerla. La moto para mí es punto final", explica, además de reconocer que la persona que le atropello asumió por completo su responsabilidad y "se portó muy bien".
El arquitecto está ahora centrado en su recuperación y en volver a trabajar en su campo, por lo que el regreso a televisión está fuera de sus planes. Preguntado por si volverá al programa de Susanna Griso, Torres confiesa que tiene muy buena relación con la presentadora, pero no tiene intención de seguir a su lado. "Yo adoro a Susanna Griso como ser humano y como profesional, pero la dirección manejó noticias falsas sobre mí y mis redes sociales, y después de oír unas disculpas completamente ambiguas sobre lo que se había dicho, decidí que no volvería a participar en una televisión que maneja mentiras para crear contenidos. Se me hizo daño como profesional", contesta dolido.
El detonante de aquel conflicto fue un reportaje del programa de Antena 3 que le acusaba de comprar seguidores en las redes sociales para ganar notoriedad. El malestar fue tal que el entonces colaborador no dudó en mostrar su enfado ante la presentadora, compañeros y telespectadores en directo. "Jugáis con un perfil profesional como el mío, que me dedico a la arquitectura. Se os llena la boca a los comentaristas pero la televisión se ha llenado de personajes que se dedican a venir a la televisión y no tienen otro oficio ni beneficio más que venir aquí a hablar de los demás", dijo, quejándose de que las burlas hacia él suponen una mala imagen para su trabajo como arquitecto.
Tras el incómodo momento, el dueño del estudio A-cero publicó un duro texto en Instagram en el que confirmó su abandono definitivo de Espejo Público. "Me voy por dar información falsa sobre mi perfil de Instagram. Me voy por no confiar ya en su dirección y no confiar en la veracidad de lo que se dice y se hace (...) Si el nuevo rumbo de la dirección de Alberto Díaz [exdirector de Sálvame] es reproducir la dirección de su antiguo programa y crear espectáculo a través del conflicto de sus colaboradores, va a ser que conmigo no. Ellos juegan con el poder que les da una cámara. Ellos juegan con la audiencia y se han olvidado de lo que es la verdad. Buscan espectáculo a costa de todo y de todos. Mi más profundo rechazo a este tipo de televisión", concluyó.
