
Carlo Costanzia y Alejandra Rubio continúa viviendo su historia de amor a pesar los múltiples impedimentos que se están encontrando por el camino: primero se acusó al hijo de Mar Flores de estar detrás de las fotografías de su primer encuentro romántico y después una de sus exnovias, Jeimy Báez, lo calificó de "manipulador" y aseguró que intentó volver con ella cuando ya estaba con la hija de Terelu Campos.
Un culebrón adolescente que esta semana ha vivido un nuevo capítulo después de que Jeimy Báez haya vuelto al programa TardeAR para contar el fuerte encontronazo que tuvo con su expareja hace apenas unas horas. Según relató la invitada a Ana Rosa Quintana, el modelo y actor acudió a su casa para recoger algunas de sus pertenencias y aprovechó para reprocharle sus actitud en los platós de televisión. Un encuentro que terminó con gritos e insultos en plena calle.
"Me levanté con llamadas en número oculto. Luego me escribió uno de sus amigos para decirme que él quería cosas suyas que había aquí. Yo le dije que no había nada de eso, solo cuatro camisetas y algunos muebles y que no quería saber nada más de Carlo. Que mis padres vienen la semana que viene, que se pusiera en contacto con ellos y que, por favor, me deje tranquila", relató Jeimy en Telecinco visiblemente afectada.
Ante la negativa de la joven a recibir a su expareja, este se presentó en la casa a las diez de la mañana, muy nervioso y "con ganas de discutir": "Se presentó aquí en mi casa a las 10 de la mañana. Me llamó desde la calle y empezamos a discutir. El abajo y yo arriba desde el balcón. Estaba fuera de sí, nervioso, queriendo subir a mi casa. Me insultó. Se pasó un poco, sí. Le pedí que se fuera", continuó narrando, asegurando que la escena se puso tan tensa que estuvo a punto de llamar a la Policía.
Reconoce que la discusión no fue en buenos términos por ninguna de las partes hasta que finalmente Carlo abandonó el lugar para más tarde ponerse en contacto con ella para pedirle disculpas: "Se marchó, me llamó. Ya estaba más calmado. Que solo quería pedirme disculpas, hablar las cosas como la gente normal. Me dijo que lo sentía mucho. Habló hasta con mis padres. Les dijo lo mismo: que me quería, que lo sentía. Pero no lo entiendo. Aquí llegó diciéndome de todo. No me creo nada de Carlo ya. Quería como justificar la liada que me había hecho al decirle a mis padres que me quería. No lo entiendo. No sabía nada de Carlo y de repente aparece aquí en mi casa de la nada".

