
Sigue el culebrón de Bertín Osborne y Gabriela Guillén, y Federico Jiménez Losantos ha confesado que cuando vio la declaración de Bertín "he dicho que es mío y ya está" pensó que Bertín no ha aprendido nada. Primero lo tendrá que decir el juez, y después saldrá la resolución y a partir de ahí, ese niño ya es hijo de su padre.
Gabriela, que ha confesado a nuestros colaboradores que se encuentra física y emocionalmente agotada, ha indicado que el niño será inscrito en el Registro Civil con los apellidos de los dos, Osborne Guillén. También se ha señalado que no hay acuerdo económico ni de custodia, ni manutención, ni de confidencialidad, que todo eso llegará en su momento, pero el primer paso es que la paternidad sea legal y si todo es de mutuo acuerdo será más fácil.
Jiménez Losantos tiene la sensación de que el entorno de Bertín es tóxico, lo hizo mal desde el principio y ahora también lo está haciendo mal porque el comunicado le parece una chapuza. Quizás deberían haber escuchado más a Fabiola, que ayer recordó en la Crónica Rosa lo que le dijo a su ex marido: "Bertín, aunque sea tarde haz las cosas bien".
Los colaboradores han comentado que Gabriela no quiere una relación económica, sino que su hijo tenga un padre. ¿Quizás está esperanzada en recuperar la relación que tuvieron en su momento? Es algo que está por ver, porque la frase de "hay 3 bolas en el bombo" que dijo el entorno de Bertín fue una frase que dolió mucho a Gabriela. Además, cuando el martes acudieron a firmar el comunicado, Bertín entraba y Gabriela salía, y únicamente se saludaron, firmaron y cada uno se fue a su casa.
Las personas cercanas a Gabriela piensan que todo este asunto, por parte de Bertín, o bien puede tratarse de un lavado de imagen o de arrepentimiento porque quiere hacer las cosas bien.
