
Las noticias sobre el estado de salud de Raphael, no son preocupantes, a pesar del gran susto que se he ha llevado el artista, y por supuesto su familia. De momento permanece ingresado en el Hospital 12 de Octubre, el mismo en el que se sometió a un trasplante de hígado en el año 2003, realizado por el doctor Enrique Moreno, al que le une una gran amistad, y es fiel a sus conciertos al igual que su equipo.
Desde el principio de su ingreso, su familia ha estado en todo momento pendiente de la evolución del cantante. Como era de esperar tanto su mujer, Natalia Figueroa, como sus hijos, siempre han atendido a los medios que permanecen apostados en la puerta del centro hospitalario. La matriarca declaró que ya estaba resignado a no poder actuar en los dos conciertos que tenía previstos en España para estas Navidades. Su hija Alejandra, ha sido la última en pronunciarse ante los micrófonos de Europa Press.

"Mi padre está muy bien. Le han hecho un estudio neurológico de urgencia que descartó que hubiera sufrido un ictus. Le están haciendo más pruebas. Esperemos que pase las fiestas en casa, pero todavía no se sabe". Todo apunta según comentó que se encuentra bien de ánimo, aunque molesto por no haber podido subirse al escenario, y haber tenido que cancelar. "Lo importante es su recuperación". Así se despidió , agradeciendo las muestras de interés, y demostrando un vez más su exquisita educación.
