
Agatha Ruiz de la Prada, siempre está creando no solo moda; poco le falta por hacer, y no para de organizar presentaciones en su nuevo local en pleno barrio de Salamanca en Madrid. Una de las muchas celebraciones navideñas ha sido una degustación de los chocolates Marcos Tonda, las últimas especias y condimentos de la tradicional firma Carmencita y un salero y pimentero agathizados. Así es como la propia autora lo describe.

"Llevo un año con estos chocolates, y el éxito ha sido morrocotudo. Vas a una cena, y llevas mis envases de sal y pimienta, quedas fenomenal por 9 euros. Acabo de volver de Colombia, que he estado 9 días, y ahora voy a presentar mi café Juan Valdés. No paro de viajar y tengo que dejar organizada la mesa para el 25, y estoy convidando a bastante gente. Y es muy posible que invite a Luismi. La verdad es que somos muy amigos. Este año a la nieta le toca con los otros abuelos, que son muy simpáticos. La nieta me tiene loca, y tiene los ojos de Tristán, es muy guapa y muy simpática. Me encanta ser abuela, llevaba 25 años queriéndolo ser. Estoy trabajando más que en mi vida." Así lo contó.
Volviendo al chocolate, lo recomienda para dormir y como sustitutivo del sexo. "Yo lo tomo por la noche, sobre todo el negro, y como he estado toda la semana pasada, hablando de café mañana, tarde y noche, he decidido hacer una cosa que es muy importante en mi vida y dejar el azúcar." Contó.

Al preguntarle por novios, con tanto viaje, no le da la vida. "No tengo tiempo, entre el chocolate, el café, la sal y la pimienta, el aceite, he hecho hasta condones, y me han dado premios en París y en Madrid. De esto hace años, y lo sigo fabricando, me falta el Satisfayer. (risas). Al 2026, le pido tener la misma fuerza que he tenido en el 2025".
