Rocacho renueva su espectacular oferta con una zona de barra para el picoteo

Rocacho abre su segundo restaurante en Madrid con la misma propuesta que el original y también con opción informal de barra y mesas altas.

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En junio de este año, Rocacho abrió su segundo restaurante en Madrid, esta vez en el número 9 de la Plaza del Marqués de Salamanca para darle una nueva versión a su casa madre pero manteniendo la esencia de un producto de extraordinaria calidad, una exquisita atención en sala y con una nueva zona que es perfecta para el picoteo.

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Espectacular cecina de buey Premium Selección José Gordón, carne de la afamada finca de El Capricho de Jiménez de Jamuz (León).

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Fuera de carta sale una estupenda anchoa del Cantábrico sobre pan y mantequilla cortada con cuchillo para no alterar demasiado el sabor y la textura de la mantequilla al ser manipulada.

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Cobra tanta importancia esta nueva zona de mesas altas y barra que hasta tiene carta propia adaptada al aperitivo que tanto gusta en nuestro país, en la que también te encontrarás con algunos de los platos estrella de la casa y siempre manteniendo el alto nivel de su producto, sin olvidar esas sobremesas que se alargan en el tiempo.

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Brocheta de atún con piparras y aceituna, perfecta para el aperitivo.

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A la izquierda está la sala, perfecta para esas comidas tranquilas y para disfrutar de lo que sale de la cocina y de las brasas tan bien controladas por Jairo.

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Relleno de sabor llega un increíble bombón de txangurro, que te lo tienes que meter entero en la boca para que el panipuri cruja y desprenda todo el relleno del preparado de centollo que llenará tu paladar de sabor a mar. Además, el plato te lo terminan en la mesa con el hielo seco que desprende ese humo tan visual.

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Fantásticas gyozas que nos sacan también fuera de carta, una rellena de boloñesa de vaca madurada con velo de cecina y la otra de rabo de buey.

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En Rocacho la cerveza de grifo que sirven es la malagueña Victoria.

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También son imprescindibles sus arroces, tan difíciles de encontrar en Madrid. Para un mínimo de dos personas, se ofrece paella del señoret, con gamba y langostino pelados; de cigalas y alcachofas; o de verduras de temporada con pollo campero; arroz con carabineros; arroz negro con sepia y alioli; y dos fideuás, una con tinta de calamar y carpaccio de gamba roja y otra de marisco.

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Paella del señoret casi a punto de servirse.

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Paella del señoret, lista para emplatar.

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Rocacho es, además del emblema del restaurante, el sentimiento de la piedra, de lo que es un asador de toda la vida.

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Las brasas, tanto para carnes como para pescados, son las grandes protagonistas de la oferta gastronómica de Rocacho.

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Jairo Soria, al frente de los fogones, se lleva un lomo de carne de El Capricho para sacar el chuletón que pasará por las brasas para deleite del comensal.

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La carne te la presentan en la mesa antes de pasar por la parrilla para que veas esa perfecta infiltracion de grasa.

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El punto de la carne poco hecho hace que se aprecie más aún ese sabor combinado con las brasas de madera de encina.

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Además, a la carne la puedes acompañar con unas maravillosas patatas fritas y unos muy buenos pimientos de piquillo de Navarra.

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La carta líquida es amplia y con numerosas referencias nacionales e internacionales, además de espumosos y destilados de gran nivel. Nosotros acompañamos la comida con un tinto de Cepa Gavilán, elaborado por la Bodega Viña Pedrosa y con DO Ribera del Duero.

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En este nuevo espacio, diseñado por el estudio de interiorismo Cuarto Interior, ofrece distintos ambientes para todos los gustos y para todas las situaciones.

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También tiene tres terrazas, dos abiertas y una cerrada, nada más entrar te encuentras con su imponente barra y la zona informal con mesas altas.

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Como punto final, un rico tiramisú que se prepara íntegramente en la mesa. En la base pone el bizcocho Pavesini mojado ligeramente con café descafeinado para que no amargue y un poquito de vino dulce Marsala. A continuación, el queso mascarpone elaborado por ellos mismos y otra capa de bizcocho, con el café, el Marsala y más mascarpone. Termina con el cacao y listo para degustar.

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La terraza descubierta en con mesas altas.

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Las sobremesas también estarán acompañadas de las primeras marcas de destilados para ofrecer una experiencia premium completa. En línea con su vocación de espacio de máximo hedonismo culinario, el restaurante cuenta con una selección de los diez licores más exclusivos del mercado, que se ofrecen tanto por botellas como en vaso tipo old fashioned y en formato shot.