El diseñador Lorenzo Caprile acudió a los estudios de esRadio para hablar en Es la mañana de Federico de su labor en la moda española y de cómo compagina esa profesión con la de la de figurinista teatral que ejerce en la Compañía Nacional de Teatro Clásico en Almagro.
Caprile, que lleva 25 años en la profesión de modisto, es -tal y como aseguró Federico Jiménez Losantos, "el hombre que consiguió que Letizia fuera una mujer elegante, y en muy poco tiempo".
Se trata del espectacular vestido rojo que llevó la actual Reina en la boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson hace ahora 13 años, la presentación "oficial" de Letizia a la realeza europea... y "la primera vez que ella realmente triunfó y humilló a parte de su familia", explicó Federico. Caprile señaló que, sin embargo y a pesar de estos éxitos, prefiere mantenerse "muy al margen" del "mundo oficial de la moda".
De lo que sí habló en la crónica rosa de esRadio de la evolución de la moda en los últimos años. "El concepto de elegancia ha cambiado muchísimo. Ahora creo que, poco a poco, nuestra profesión está dejando de ser producto -que lo hacen cinco marcas globales que todos conocemos- y la moda como industria se está transformando en una industria de contenidos en revistas o redes sociales. Lo que importa ahora es hacer ruido con contenidos y ganar dinero con el merchandising, que no tiene nada que ver con la ropa".
El diseñador de alta costura explicó con cierta amargura que "hay una distancia mayor entre el mundo de la moda, muy endogámico y para nosotros, y que es contenido para las revistas, los blogs e Instagram, y luego lo que realmente llevamos las personas en la calle. Esa distancia cada vez es mayor".
Pero ¿y qué llevan las personas por la calle? Caprile lo resumió en que "lo que queremos es ir comodos y salir de paso". Y el resultado, por eso, "es muy triste". "La moda es el primer reflejo de como evoluciona la sociedad y el ser humano. Y vamos hacia una absolutamente práctica, comodona, adolescente. Nos queremos mantener en una adolescencia eterna, antes era impensable ir a trabajar en zapatillas de deporte".
Lo que ha dado lugar a tendencias con las que no está conforme, como son el chándal o el unisex. "En verano todavía hay alguna diferencia porque la gente se destapa más, pero en los meses", dijo en esRadio. "Nunca ha habido tanta información como ahora sobre moda, y paradójicamente, cuanta más información hay peor vamos vestidos".